Para contribuir a la prevención del COVID-19 en los pueblos amazónicos y andinos del Perú, Unicef en conjunto con la ONG Salud Sin Límites Perú, con el apoyo del Ministerio de Salud y el Ministerio de Cultura, difundirán microinformáticos en cinco lenguas originarias para que la población shipibo-konibo, aymara, awajún, asháninka y quechua puedan manejar información en sus lenguas y eviten el ingreso del virus a sus comunidades.
El manejo de información es la segunda herramienta más importante durante esta pandemia, por ello, los mensajes llegan en cinco lenguas originarias para que las familias puedan entender qué es el coronavirus, cómo evitar el contagio, cuáles son las medidas de prevención, por qué seguir el aislamiento social y cómo evitar la discriminación contra las personas infectadas.
La información se difundirá a través de microinformativos grabados en lengua asháninka, awajún, aymara, quechua, shipibo-konibo y español; y que serán transmitidos en emisoras radiales de diversas regiones del país con el objetivo de llegar a los pueblos indígenas y amazónicos.
El contenido de los programas ha sido rigurosamente evaluado de acuerdo a la necesidad de información de las comunidades y a las recomendaciones brindadas, buscando sensibilizar a las familias, informó Unicef a INFOREGIÓN.
Uno de los primeros temas que se toca es el significado del COVID-19, qué síntomas puede presentar y explica que para este virus aún no se encuentra la cura. También se advierte a las comunidades, sobre las formas de contagio del virus y cómo este puede permanecer durante varios días en las superficies que tocamos. Para ello, se resalta y se explica cómo debe ser el lavado de manos.
Las medidas de prevención y el aislamiento social dictadas por las autoridades son temas sobre los cuales también se les advierte a las familias ya que es la única manera de contagiarse y de poner en riesgo a los demás pobladores.
La discriminación hacia las personas con COVID-19, es un punto que se toca en los microinformativos para que los pobladores no expulsen a las personas diagnosticadas con la enfermedad, ni tampoco las agredan ni las marginen. En estos casos, lo más importante es pedir ayuda al personal del Ministerio de Salud o llamar a la línea de ayuda telefónica 113 para pedir orientación.