DEVIDA está preparando una propuesta que busca establecer Redes de Atención Regional que permitan el tratamiento de la adicción a las drogas, aprovechando toda la capacidad disponible en materia de salud de los gobiernos regionales, señaló el gerente de Prevención y Rehabilitación de Consumo de Drogas de esta institución, Eduardo Haro.
Indicó que esta red regional se da en el marco del Sistema Integral de Salud (SIS) y de la descentralización de las competencias de salud que, en el caso de los departamentos, están ahora en manos de los gobiernos regionales.
“La semana pasada tuvimos un encuentro en Lima con representantes de 18 Direcciones Regionales de Salud (Diresa) para empezar a trabajar, en el marco del Sistema Integral de Salud una propuesta de redes de atención regional para el tratamiento de personas adictas a las drogas”, detalló el funcionario.
Trabajo con las Direcciones Regionales
Haro afirmó que se requiere una labor integral en la que participen todas las instancias administrativas con capacidad de decisión, como son en este caso las Direcciones Regionales de Salud, a fin de contar con recursos humanos, logísticos y económicos que permitan atender debidamente a las personas, tanto en el ámbito de la prevención como en el tratamiento para dejar la adicción.
Dijo que la estrategia de prevención y tratamiento implica enfrentar las amenazas, tanto de las drogas cocaínicas y la marihuana, que son las más consumidas, así como las drogas sintéticas como el éxtasis y otras cuyo aumento en la demanda preocupa a las autoridades.
En otro momento, Haro adelantó que en agosto o setiembre próximo, Devida dará a conocer los alcances de la Encuesta Nacional sobre Prevención y Consumo de Drogas en Escolares, realizada en 2009.
Dicho estudio brindará información sobre prevalencia del consumo de drogas, comparación del consumo de drogas legales, ilegales y médicas, incidencia del consumo, edad de inicio.
Además, se conocerá la frecuencia de uso de drogas ilegales, ofrecimiento de drogas ilegales, disposición al consumo de drogas ilícitas, facilidad de acceso a drogas ilegales, demanda de orientación y de tratamiento, acceso a servicios de tratamiento por consumo de drogas, percepción de los programas y acciones de prevención en la institución educativa, y opinión sobre la actitud preventiva de las autoridades escolares.