Mientras desarrollaban sus habituales tareas de protección a los erradicadores del Proyecto CORAH que vienen eliminando cultivos de coca ilegal en los poblados de Santa Marta y La Morada, sector de Yanajanca, distrito de Cholón, en Huánuco; efectivos antidrogas ubicaron y destruyeron dos laboratorios de elaboración de drogas camuflados entre los cultivos ilegales, sumando un total de nueve encontrados en el mismo sector en esta semana.
En esta última jornada de erradicación, los trabajadores del Corah eliminaron un total 1*038,080 plantas de coca en 35.27 hectáreas de coca ilegal sembradas en 25 parcelas de la zona, de las cuales 8 eran parcelas que ya en el 2007 habían sido erradicadas.
Mientras tanto, el personal policial encontró dos laboratorios de elaboración de pasta básica de cocaína, con sus respectivas pozas de maceración y de decantación además de 20 galones de kerosene, 20 kilos de cal, mil kilos de detritus así como material de batido y pesaje de la droga.
Asimismo se destruyeron 72 metros cuadrados de almácigos de coca que convertidas en plantaciones definitivas equivalen a 4.80 hectáreas.
El operativo se llevó a cabo con el apoyo logístico de dos helicópteros UH-2H de la Aviación Policial y la participación del Fiscal Provincial Mixto de Tocache, José Segundo García Iman.
Nueve en solo una semana
Con este hallazgo, suman ya nueve los laboratorios de elaboración de droga encontrados en esta semana en el mismo sector de Yanajanca, camuflados entre plantaciones de coca ilegal.
Así, en los operativos de erradicación de cultivos ilegales realizados el 8 y 9 de julio, en donde se eliminaron 55 hectáreas de coca ilegal, la policía antidrogas ubicó y destruyó cuatro laboratorios de droga, con sus respectivas pozas de maceración y decantación, diez mil kilos de detritus, 20 galones de kerosene, equipos de medición y hasta un trampero de los que colocan los cocaleros en medio de los cocales para ocasionar lesiones entre los erradicadores de coca.
Dos días antes, y en los mismos sectores del distrito de Cholón, se destruyó tres laboratorios de elaboración de pasta básica de cocaína así como insumos químicos, confirmando con ello que los cultivos ilegales de la zona no van ni por asomo al cultivo tradicional sino que alimentan directamente al narcotráfico.