El Grupo de Operaciones Antidrogas Tácticas en Jungla (GOATJ) destruyó un laboratorio clandestino rústico de procesamiento de clorhidrato de cocaína que estaba instalado cerca al centro poblado de Comunpiari, a orillas del río Apurímac, en el distrito de Santa Rosa (VRAEM) y que era de propiedad del presunto traficante de drogas conocido con el alias de “Oveja”.
La unidad élite de la DIRANDRO, a bordo de seis vehículos policiales, incautó enseres, gatas hidráulicas, molino eléctrico, prensas de metal, alambiques de metal para el prensado de droga, hornos microondas, cocina, balones de gas, ollas, timbos de plástico.
Igualmente incautó insumos químicos y productos fiscalizados como acetona, alcohol, ácido clorhídrico, urea y amoniaco, los que son utilizados en el procesamiento de clorhidrato de cocaína.
Al notar la presencia de la policía, uno de los sicarios que hacía de seguridad del laboratorio de clorhidrato de cocaína, arrojo un rifle semiautomático, marca máuser, dándose a la fuga por la espesa y agreste vegetación.
Según informó la policía, el propietario del laboratorio clandestino rústico destinado al procesamiento de clorhidrato de cocaína, tendría nexos con traficantes de drogas de nacionalidad extranjera.