Hasta en un 30% se revertirían las causas de la desnutrición crónica infantil en nuestro país si se garantizara el consumo de agua potable (o apta para el consumo humano) y las condiciones de saneamiento básicas en las viviendas, destacaron los especialistas del Ministerio de Salud (Minsa).
El director de Promoción de la Salud del Minsa, Hamilton García, recordó que la desnutrición crónica responde a diversos factores como el pobre nivel educativo de la madre, el bajo ingreso económico familiar, la falta de acceso a los servicios básicos de agua y saneamiento, las malas prácticas alimentarias e higiene personal.
“Es fundamental garantizar y promover el consumo de agua potable así como mejorar las condiciones de saneamiento, en especial, de los hogares pobres y del interior del país”, manifestó García.
Tras indicar que estas iniciativas han contribuido a la reducción en 7% de la desnutrición crónica en el país, lo que equivale a más de 210 mil niños saludables, el especialista destacó que este índice actualmente es de 18%, a diferencia del año 2006, que representaba el 25%.
Acciones por la salud
El Minsa promueve el lavado de manos y acciones para mejorar los sistemas de abastecimiento de agua y la eliminación de residuos sólidos y excretas, en coordinación con los gobiernos locales.
“Una práctica tan sencilla como lavarse las manos antes de comer y después de usar los servicios higiénicos, entre otros momentos claves, evita en un 80% enfermedades diarreicas y hasta en un 70% las infecciones respiratorias agudas, cuyos episodios sucesivos en conjunto ocasionan anualmente la muerte de 3,5 millones de niños y niñas”, expresó García.
Cabe indicar que en 20 mil instituciones educativas se realizan acciones permanentes de sensibilización y capacitación en alimentación saludable y promoción del lavado de manos, a través de sesiones demostrativas, dirigidas a docentes, padres de familia, alumnos, así como a más de 35 mil agentes comunitarios de salud, a nivel nacional.