Las promesas del hoy presidente de la República Ollanta Humala Tasso a los productores cocaleros del Alto Huallaga, hechas durante su campaña electoral, le están pasando la factura y han desencadenado las medidas de fuerza de este sector, que hoy entra a su quinto día de huelga en la provincia de Padre Abad, exigiendo la paralización de la erradicación de los cultivos de coca.
Esa es la conclusión a la que llegó el analista en el tema de narcotráfico, Rubén Vargas Céspedes al comentar la huelga indefinida que acatan los cocaleros de Aguaytía desde las cero horas del domingo y que ha ocasionado el bloqueo de la carretera Federico Basadre y pérdidas millonarias a la región.
“El tema de Aguaytía es consecuencia del manejo equivocado del Gobierno y del manejo torpe de los funcionarios encargados de ver el tema del narcotráfico y de la coca ilegal”, comentó Vargas en los estudios de Radio Rumba de Tingo María, durante una entrevista con el informativo El Diario del Aire una co producción con INFOREGIÓN.
Explicó que el problema del Gobierno comenzó con sus mensajes equivocados. “Primero anunció la suspensión de la erradicación de manera indefinida. Luego, la suspensión por un año. Luego, suspendieron la erradicación en Tingo María, y luego la reiniciaron una semana después, pero en Aguaytía. Hoy no se sabe qué va a pasar”, sostuvo Vargas.
Al referirse al lavado de activos, Vargas expresó sus dudas sobre la efectividad de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), encargada de detectar movimiento de capitales sospechosos de proceder del narcotráfico.
“Sin facultades, sin posibilidades de realizar investigaciones, sin atribución para levantar el secreto financiero, bancario o tributario, la UIF es solo una mesa de partes de operaciones sospechosas. En todos sus años de funcionamiento no hay un solo caso que haya terminado en una sentencia condenatoria”, afirmó.
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