El alto grado de desaprobación que tiene la gestión de Gobierno en las regiones del interior del país complica la situación del Gobierno y puede dar pie a la gestación de movimientos ocultos que capitalicen el descontento popular, explicó el director de la encuestadora CPI, Manuel Saavedra.
El analista señaló que por ello el Gobierno debe priorizar el trabajo con los gobiernos regionales y con los municipios provinciales y distritales, para lograr consenso sobre una línea de trabajo con las autoridades del interior para que la población perciba trabajos a favor del desarrollo.
CPI publicó una ultima encuesta de opinión en la que el presidente Alan García tiene 34.3% de aprobación, que refleja un severo descenso respecto del 45.3% de aceptación que tenía en mayo último. En tanto, es la ministra de Transportes y Comunicaciones, Verónica Zavala, la que registra un mayor nivel de desaprobación, pues el 26% de la población reclama su salida.