A menos de dos meses de haber asumido sus funciones como gerente de SEDA Huánuco y de ser presentado como el funcionario que podía mejorar el servicio de agua potable en la localidad, el ingeniero Jorge Jiménez Ibarra fue denunciado por trabajadores de esa empresa por usurpación de funciones y por su trato prepotente, autoritario y ofensivo contra ellos.
Los trabajadores anunciaron la posible adopción de medidas de fuerza y lo acusaron de usurpar funciones administrativas, debido a que se dedica a efectuar sus propias licitaciones públicas, dejando de lado los canales formales de compra.
Ello se grafica en diversos e innecesarios viajes a Lima para comprar uniformes, cuando en SEDA-Huánuco existe un área de logística.
Asimismo, realizó otra travesía a la capital para averiguar detalles de materiales cuyas especificaciones ya habían sido publicadas en el SEACE, para luego tratar de postergar su adquisición, por razones que se desconocen.
De acuerdo con los trabajadores de SEDA-Huánuco, los viajes fueron solventados por la empresa.
Del mismo modo, denunciaron que Jiménez Ibarra colocó a practicantes como responsables de la oficina de atención al cliente, pese a carecer de autoridad y de conocimientos vinculados con el servicio de agua.
Finalmente, señalan que ha contratado a Manuel Aguirre Aguirre para el cargo de coordinador comercial, por medio de un supuesto concurso de méritos, desplazando a experimentados y reconocidos profesionales del medio.