En los últimos años, la invasión de territorios de las comunidades nativas viene provocando la destrucción de cientos de hectáreas de bosques en el valle de los ríos Apurímac y Ene, VRAE, no obstante lo peor de la situación es que estos terrenos arrebatados a los árboles se utiliza para cultivos de hoja de coca ilegal que no solo malogra los suelos sino que además los contamina con insecticidas y agroquímicos, denunció Isabel Barbosa, presidenta de la Organización Asháninca del Valle del Río Apurimac, OARA.
“Las comunidades ashánincas, que tienen gran cantidad de terreno, denuncian que colonos se están apropiando cada vez más de territorios. Bueno fuera para realizar buenas prácticas, pero es todo lo contrario. Están arrasando los bosques y están dejándo los cerros pelados para luego sembrar la coca”, denunció en el noticiero Diálogo Ciudadano, que emite INFOREGIÓN desde San Francisco hacia todo el VRAE.
Alertó, asimismo, que esos cultivos ilegales utilizan excesivamente agroquímicos altamente tóxicos. «Todos estos residuos tóxicos son arrastrados por la lluvia hacia los ríos lo que causa contaminación irreparable que cada vez nos va dejando sin peces ni caracoles para nuestro consumo”, manifestó la representante de la OARA, quien consideró que esta situación genera incremento en los niveles de desnutrición infantil
“Tenemos que trabajar todos unidos para cambiar esta situación negativa que nos viene afectando, no solo a las comunidades nativas sino también desde la escuelas para promover cambios de actitud frente a la utilización de los pesticidas y el cuidado de nuestros recursos naturales”, estimó.
Finalmente, pidió a los alcaldes y demás autoridades coordinar con la dirigencia del OARA a fin de estar más atentos y vigilantes frente al problema de la contaminación.