En Colombia, la Fiscalía General de la Nación documentó por primera vez la forma en que las mafias del narcotráfico utilizaron las playas de los parques nacionales naturales de Salamanca y Tayrona, en la Costa Atlántica, como sofisticadas caletas para esconder cientos de toneladas de droga con destino a Estados Unidos, reveló el diario El Espectador.
Según refiere el medio colombiano, la organización, liderada por Arturo Acosta Ariza, enviaba inicialmente el estupefaciente en lanchas rápidas hacia Nicaragua y Honduras.
El diario agrega que la policía antinarcóticos de Colombia capturó precisamente ayer, miércoles 04 de noviembre, a Acosta Ariza y otras 15 personas relacionadas con su organización.
Indica que las detenciones se hicieron efectivas en Barranquilla, Santa Marta, San Andrés, Villavicencio y Bogotá, y que, de acuerdo con informaciones preliminares que evalúa la Policía, la banda trabajaba en conjunto con Los Paisas, aunque después comenzó a utilizar una de sus rutas y a apropiarse del millonario negocio.
Escondían la droga en contenedores que camuflaban entre los manglares
Según se dio a conocer, los investigadores policiales descubrieron que la organización de Acosta Ariza camuflaba la droga en contenedores que ubicaba entre manglares de los parques naturales o en las mismas playas mientras bajaba la tensión de los operativos de la Armada y la Policía en la zona, y después recogía el narcótico para llevarlo a alta mar.
Los parques naturales de Salamanca y Tayrona, con una extensión de 21 mil y 15 mil hectáreas, respectivamente, se convirtieron en el escondrijo de cientos de toneladas de droga que después era despachada hacia Estados Unidos.
Autoridades refuerzan control en parques
Sobre el caso, la directora de Parques Naturales Nacionales de Colombia, Julia Miranda, reconoció que en julio pasado recibió información del último decomiso que hizo la Policía en la zona, pero indicó que la situación ha sido paulatinamente superada.
Sostuvo que la Policía de su país reforzó la seguridad en el Parque Tayrona, mientras la Armada Nacional colombiana lo hizo en el Parque Isla Salamanca. “Incluso ya hemos puesto en marcha varios programas de ecoturismo en este último parque”, afirmó.
Del mismo modo, agregó que las organizaciones ilegales no sólo han utilizado los parques naturales para el transporte de estupefacientes, sino para la tala ilegal de madera. Por eso con las autoridades se realizan operativos coordinados para reducir el tráfico ilegal de madera en parques como Paramillo, Los Catíos y El Cocuy. En relación con el tráfico de fauna dijo que uno de los más perjudicados es Amacayacu.
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