Agentes de la División Antidrogas (Divandro) de Cusco incautaron más de 80 kilos de pasta básica de cocaína (PBC) y detuvieron a siete personas, entre ellas un menor de edad, en tres intervenciones realizadas el miércoles en las provincias de Calca y Cusco, se informó hoy.
El jefe de la Divandro Cusco, coronel Guillermo Flores Gil, dijo que la mayor cantidad de droga se decomisó en la camioneta de placa C2P-919 que tenía en compartimentos caleta y el tanque de combustible 26 paquetes en forma de ladrillo y 60 botellas descartables con 71 kilos con 190 gramos.
En el vehículo viajaba un adulto y un menor. Los agentes protagonizaron una persecución por cinco kilómetros en el distrito de Coya, en Calca, a la camioneta que iba escoltada por otra de matrícula W1T-829 que también fue interceptada y su conductor capturado.
El oficial indicó que la droga proviene del valle de los Ríos Apurímac y Ene (VRAE) y el conductor tomó la carretera Quillabamba-Yanatile-Cusco, porque la vía Quillabamba-Cusco registra obstrucciones en algunos tramos por derrumbes debido a intensas lluvias.
Los paquetes de droga estaban forrados con cinta adhesiva color amarillo, lo cual, según peritos policiales, demostraría que es una firma y tenía un solo destinatario, presumiblemente en la ciudad de Juliaca, en el departamento de Puno.
En la segunda intervención se detuvo a tres personas: una en el terminal terrestre de paso de Puquín, en el distrito cusqueño de Santiago, y dos a la altura de la comisaría de San Jerónimo.
Los intervenidos llevaban nueve kilos de PBC en forma de encomienda a la ciudad de Sicuani, capital de la provincia de Canchis.
Por la noche se detuvo al sétimo individuo en el terminal terrestre de Cusco, que llevaba un kilo de PBC adherido a su cuerpo (modalidad de momía).
Todos los detenidos fueron conducidos a la Divandro; sus identificaciones se mantienen en reserva y serán investigados por 15 días por la Policía Nacional y la Fiscalía Antidrogas de Cusco