El analista en temas de narcotráfico, Fernando Rospigliosi Capurro, consideró meras palabras y un discurso para la tribuna, la invocación presidencial de que aviones A-37 bombardeen los laboratorios para la elaboración de pasta básica y clorhidrato de cocaína en las zonas cocaleras.
“El presidente no puede ordenarle al Ministerio del Interior que bombardee con aviones A-37 porque no los tiene ni los va a tener nunca. En segundo lugar, quien tiene esos aviones es la Fuerza Aérea, que está prohibida de intervenir en la lucha antidrogas. En tercer lugar, es imposible bombardear las pozas de maceración porque no se ven, están debajo de los árboles”, refirió Rospigliosi en una columna de opinión publicada hoy en el diario Perú.21.
El ex ministro del Interior también dijo que en esas pozas de maceración trabajan niños y campesinos contratados por los narcotraficantes, y bombardearlos sería una crueldad.
“Las cosas que dice son una muestra de que no está dispuesto a mover un dedo en contra del narcotráfico. Nadie que tenga un mínimo de conocimiento de este tema le va a creer. Está tratando de ocultar el Acta de Tocache y la inacción del Gobierno en la lucha antidrogas”, fustigó Rospigliosi Capurro.