CUSCO. Con ritos y escenificaciones, la región Cusco celebró el inicio del año nuevo agrícola. Se hizo una ofrenda a la Pachamama o Madre Tierra. Esta es una tradición de la cosmovisión andina, que después de más de un año de pandemia se vuelve a realizar de manera pública.
En el parque arqueológico de Sacsayhuman, se congregaron aproximadamente un centenar de personas para rendir culto a la tierra en la ceremonia Pachamama Saminchay que significa, “te agradecemos madre tierra”. Pese a la pandemia, el poblador andino tiene mucho que reconocer a quien provee de alimentos, cobijo, nutre y protege como es la Pachamama.
En un gran agujero se colocaron panes de fiesta o jurka, frutas, dulces, maíz tostado, vino, cerveza, chicha de jora entre otras ofrendas. Todas son una muestra de retribución por todo lo dado durante el periodo agrícola. Una pequeña ofrenda fue incinerada para que el humo vaya hacia los dioses o Apus tutelares del Cusco
La costumbre también se realiza en las casas. Durante las primeras horas del primer día de agosto, las familias cusqueñas realizan pequeños rituales con mistura y flores amarillas, sahumerios y vino que son arrojados en el perímetro de las viviendas para atraer prosperidad al hogar.
Fuente: La República