Han transcurrido dos meses, desde que 120 familias damnificadas por las fuertes lluvias del mes diciembre, fueron reubicadas temporalmente en el sector de inkar, sin que hasta el momento reciban ayuda ni alimentos o techo que los proteja.
Niños, madres y ancianos habitan chozas en condiciones infrahumanas, en donde no existen los servicios básicos, no hay agua ni desagüe y los niños sufren de enfermedades diarreicas, alergias y desnutrición.
Juan Picón, alcalde provincial de Leoncio Prado, prometió entregarles gratuitamente letrinas para mejorar la salubridad del lugar, pero han transcurrido ya 60 días y el apoyo del burgomaestre brilla por su ausencia.