El cuerpo del suboficial de la PNP César Antonio Vilca Vega encontrado en la zona de Alto Lagunas en Kiteni por su padre, Dionisio Vilca, llegó hace unos momentos a Lima en un avión Antonov que los trasladó desde el aeropuerto en el sector Las Malvinas en la provincia cusqueña de La Convención.
Antes de su partida, el cuerpo de César Vilca recibió los honores en la misma ciudad de Kiteni por sus colegas de armas, la alcaldesa de La Convención, Fedia Castro, autoridades de la zona y población, para luego partir en un Helicóptero MI-17 desde el Aeródromo de Kiteni al aeropuerto en el sector Las Malvinas.
Fuentes confiables de INFOREGIÓN, indicaron que recién en horas de la madrugada, se pudo saber con exactitud que el cuerpo hallado en Alto Lagunas corresponde a César Antonio Vilca Vega, tras la necropsia practicada por el personal médico del puesto de salud de Kiteni.
Nuestros informantes señalaron que el padre de César Vilca, Dionisio Vilca, logró reconocer el cuerpo de su hijo por la marca de ropa interior que el efectivo de la DINOES siempre usaba. “El papá logró reconocer al cuerpo de su hijo por los brackets así como la marca y el tipo de ropa interior que el cuerpo tenía”.
Dionisio Vilca, padre del suboficial asesinado, encontró el cuerpo en posición de decúbito ventral, es decir, boca abajo, por lo que supone la fuente que la víctima fue ultimada con un disparo a la altura de la cabeza, en la región occipital.
“El cuerpo fue encontrado boca abajo, no traía sus borceguís, y tenía la cara destrozada por lo que en un primer momento no se pudo comprobar con facilidad la relación entre el cuerpo y el efectivo desaparecido”, explicó.
La fuente también dijo que por petición de los nativos de la zona, el padre no decidió dar cuenta del supuesto hallazgo de un cuerpo en la zona de Alto Lagunas a las fuerzas combinadas, para evitar poner en riesgo la vida de los civiles que acompañaban a Dionisio Vilca.
El cuerpo de César Vilca Vega fue encontrado por su padre y el apoyo de dos nativos 20 días después de que su comando, por órdenes de los mandos militares, lo abandonaran en la zona de Postaquiato, dejándolo a su suerte ante las columnas terroristas de la zona.
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