El especialista en temas de desarrollo Jaime García destacó que el cooperativismo es uno de los principales componentes que ha generado el éxito del desarrollo alternativo en las zonas donde se busca que los agricultores abandonen el cultivo de hoja de coca ilegal, que sustenta la economía ilícita del narcotráfico.
“Las cooperativas permiten trabajar mejor con los productores la asistencia técnica, facilitar el acceso al financiamiento y la capacitación. El cooperativismo es un mecanismo que tiene ventajas sobre otras organizaciones, para los agricultores también es más fácil el reparto de las utilidades y se evitan procesos engorrosos”, explicó durante el programa Diálogo Ambiental de INFOREGIÓN, que se emite en el Alto Huallaga, el VRAE y Madre de Dios.
En otro momento, el especialista subrayó que el Estado debe invertir mayores recursos para promover este tipo de asociatividad. Además, precisó que si se promueve la formación de cooperativas o asociaciones de productores, existen mayores posibilidades de que las actividades económicas de los productores sean sostenibles.
“Llegar al productor de forma individual es difícil y no es sostenible. El Estado debe promover la conformación de cooperativas y asociaciones de productores”, insistió.
Cooperativismo es óptimo en el VRAE y el Huallaga
García enfatizó que el cooperativismo es la figura óptima para los productores del VRAE y del Alto Huallaga y dijo que “el Estado debe recuperarla, ya que aún hay una mala imagen en el propio sector financiero, que no entiende muy bien ese modelo de asociatividad”.
“El aspecto normativo actualmente es bastante aceptable, pero se requieren precisiones en el tema tributario. Es algo que los productores reclaman permanentemente”, indicó.
También felicitó a los productores y dirigentes de la Cooperativa Agraria Industrial Naranjillo Naranjillo que obtuvieron el premio del décimo Concurso Nacional de Proyectos, que organizó Fondoempleo.
“La felicitación a la cooperativa Naranjillo, que se suma a otros méritos de diversos productores cafetaleros y cacaoteros que se esfuerzan por sacar adelante a sus familias y vivir en una economía lícita”, expresó.
El experto afirmó que los éxitos de los cafetaleros y cacaoteros peruanos demuestran que existe una alternativa real y lícita para todos los agricultores y sus familias.
“Ése es el resultado del trabajo conjunto de la cooperación internacional, de los agricultores asociados y del Estado, cuyo trabajo aún debe crecer en todos los niveles de gobierno”, agregó.
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