El Perú puede sentirse orgulloso por un nuevo logro alcanzado esta vez por una organización de pequeños productores cafetaleros de Huanuco, como la cooperativa La Divisoria, que acaba de ganar el premio latinoamericano de ‘Experiencia excelente en biodiversidad’ demostrando que los cultivos lícitos sí son una alternativa viable en el Alto Huallaga.
Este reconocimiento resalta el trabajo de la organización para mejorar e implementar el uso de abonos orgánicos preparados con microorganismos eficientes, contribuyendo a reducir el impacto en el medio ambiente y ser una alternativa viable a los cultivos ilegales de hoja de coca para el narcotráfico.
Esta técnica le ha permitido a cooperativa La Divisoria no sólo recuperar terrenos que habían perdido productividad, sino además mejorar la calidad de su café y de su cacao. Los resultados han sido realmente asombrosos.
La productividad del café se incrementó de inmediato de 14 quintales por hectárea antes de la abonación, a 22 quintales, gracias a los microorganismos eficientes. Y la calidad del café también mejoró, pasando de ser “calidad A”, para convertirse en “calidad AAA”.
Además, estos abonos, al ser preparados con materias orgánicas que se encuentran en la parcela de los agricultores, son más baratos que los químicos. Y finalmente, estos abonos cuidan el medio ambiente, regeneran los suelos y producen alimentos sanos.
Los socios de la cooperativa La Divisoria, que son pequeños productores de la Selva peruana, se han vuelto expertos en este método que se practica a nivel mundial. Por eso, del 7 al 16 de junio, la cooperativa La Divisoria ha organizado un taller internacional de abonos orgánicos con la presencia de expositores de México, Costa Rica y Brasil.
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