Consideran que prohibir la inversión privada es condenar a los pueblos al atraso

El analista en temas de inversión y desarrollo Pablo Bustamante, consideró que la oposición de algunos sectores al ingreso de la inversión privada al departamento de Ayacucho y a su capital Huamanga traería solo retraso y no permitiría el progreso de esta ciudad que actualmente mantiene niveles altos de pobreza.

En entrevista concedida a INFOREGIÓN Noticias Huamanga, noticiero coproducido con el diario Jornada, Bustamante Pardo dijo lamentar que algunos sectores minoritarios se opongan a la inversión privada «solamente porque no quieren dejar los privilegios que tienen durante mucho tiempo».

El especialista explicó que en buena cuenta el rechazo a la inversión privada se debe a que existen mentiras creadas en torno a ella, mismas que no consideran que la existencia de grandes capitales mejoraría claramente la visión de muchos de los ayacuchanos y “cambiaría el discurso ideológico y político que actualmente se tiene en Ayacucho, un discurso que no es el mayoritario”.

Terminal terrestre debe contar con inversión

El consultor consideró, más adelante, que si el terminal terrestre de Huamanga es administrado por la municipalidad provincial, se generaría corrupción pues nadie fiscaliza al gobierno huamanguino.

«Va a haber más gasto que inversión y ganancias para todos los ayacuchanos. Finalmente, tendremos un servicio deficiente que no serviría para lograr una mejor atención a la población», estimó.

Destacó, en ese sentido, que la inversión privada traería mayores recursos y permitiría un control más eficiente por parte del propio municipio provincial, así como de la prensa, las organizaciones sociales y la misma población. “Tendríamos un mayor ingreso y el mejoramiento de la calidad de servicios que ofrece el terminal terrestre”, aseguró.

Agregó que no es posible alcanzar el desarrollo sin un alto nivel de inversión, como la que hoy se está trasladando a las regiones para originar mayores posibilidades de desarrollo y alternativas de progreso.

“Ahora la población, especialmente la juventud ha cambiado, hace poco estuve por Ayacucho y muchos jóvenes se me acercaban para saber cómo generar mayor progreso y desarrollo para Huamanga, y yo les digo que nos unamos al grito que hiciese una universitaria ‘tenemos sed de progreso’, saciemos nuestra sed con la inversión privada”, comentó.

Metas para el bicentenario

Finalmente, Bustamante invocó a la población de Ayacucho a trazarse metas definidas para los años venideros de cara al bicentenario de la independencia del Perú.

“Tenemos un bicentenario y debemos tener metas definidas. El 2021 celebramos la independencia del Perú y el 2024 tenemos el bicentenario de la independencia latinoamericana, apuntemos a que Ayacucho en 2024 tengamos cero desnutrición, cero extrema pobreza”, afirmó.