El trabajo realizado por el Organismo de Supervisión de los Recursos Forestales y de Fauna Silvestre (Osinfor) rindió sus frutos al confirmar que los encargados de la Dirección Forestal de Atalaya (Ucayali) y un grupo de extractores madereros habían acordado talar y traficar madera de la comunidad Chincheni, zona en la que está prohibida la extracción de acuerdo a ley.
Fue el consejero Javier Bonilla Pomachari quien denunció el blanqueo de madera con documentos en mano, logrando la atención del organismo de supervisión que constató los hechos, según información remitida a INFOREGIÓN.
Funcionarios de Osinfor visitaron la comunidad Corintoni (zona autorizada), en donde conversaron con las autoridades, quienes expresaron que en ningún momento salió madera de esa comunidad y que tampoco permitieron la tala de árboles.
“Corintoni sí tiene autorización, pero nadie tala sin el permiso de las autoridades. Si pese a todo estuvieran talando, serían expulsados”, mencionaron los comuneros a un medio local.
Para el organismo estatal sí existe tráfico de madera, pues los madereros ilegales extraen diversas especies de zonas no autorizadas, para luego legalizarlas con permisos de aprovechamiento forestal o contratos de concesiones en zonas diferentes al lugar de extracción.
“Osea, talaron madera de la comunidad Chincheni y la hicieron pasar como procedente de Corintoni”, señalaron fuentes de la zona (INFOREGIÓN).
Los comentarios están cerrados.