Comunidades piden proyectos de desarrollo e inversión con perfil a favor del medio ambiente

El ex presidente de la Federacion Nativa del Río Madre de Dios y Afluentes (Fenamad) Julio Cusurichi Palacios, pidió que los comuneros tengan mayor información y participación de los diversos proyectos de conservación y recuperación de la Amazonía, que deben ser de más largo aliento y con objetivos claros que también beneficien a los nativos de la zona.

Fue en el marco de la novena conferencia anual de la Fundación Internacional de los Pueblos Indígenas (Ifip por sus siglas en inglés), realizado del 15 al 17 de mayo en la ciudad de Tofino, Canadá, a donde el líder del pueblo de la etnia shipiba de Madre de Dios asistió en representación de las comunidades nativas peruanas.

Cusurichi Palacios alzó su voz indicando que los programas y recursos de algunos organismos no gubernamentales que operan en la zona amazónica deberán alcanzar resultados más ambiciosos, y resaltó los peligros que se ciernen sobre la amazonía ante las malas políticas de los gobernantes de turno y de algunas empresas transnacionales que no tienen clara su visión sobre el desarrollo sustentable y armónico.

Entre los principales problemas que aún no tiene solución, el representante nativo destacó la tala ilegal, las mafias de la madera, la minería informal que contamina los ríos, las invasiones de territorio con fines extractivos, la construcción de carreteras sin planificación previa, todo lo cual abona para el surgimiento de conflictos sociales.

El líder shipibo pidió que los proyectos deban ser diseñados desde sus inicios conjuntamente con las comunidades nativas y con el conocimiento de las organizaciones internaciones y regionales indígenas.

Insistió en la necesidad de concretar planes que tiendan a atender las necesidades de la región, y ayuden a resolver los problemas económicos de las comunidades, así como fortalezcan las capacidades individuales y grupales de los miembros de la organización.

Un tercer punto expuesto giró en torno a la pertinencia de desarrollar compromisos más largos y durables, que no culminen en apenas un año sino que tengan una vida útil de por lo menos cinco a seis años, con el objetivo de alcanzar resultados más concretos.

Cururichi invitó a las diversas instituciones, fundaciones y organismos no gubernamentales a colaborar, invertir y trabajar en proyectos conjuntos con los nativos de la amazonía peruana, desde un punto de vista de conservación y solución a los problemas ambientales que afectan a nuestro planeta.