La presidenta de la Organización Ashaninka y Machiguenga del Valle del Río Apurimac (OARA), Isabel Barboza, señaló que su organización no se siente representada por la Asociación de Municipalidades del Valle de los Ríos Apurímac y Ene (AMUVRAE) y otras organizaciones que se encuentran en Lima conversando con los representantes del gobierno, pues no fueron tomados en cuenta para el viaje y desconocen las demandas que tienen las comunidades originarias del VRAE.
En ese sentido, la representante de las comunidades nativas expresó su malestar por no haber sido consultada sobre el viaje que realizaron las autoridades y algunos representantes de las organizaciones sociales del VRAE, pese a que la OARA integra el Comité de Gestión que tiene por finalidad hacer cumplir con las demandas consensuadas del II Congreso Interregional.
“En la comitiva del VRAE, que se encuentra en la ciudad de Lima, no hay ningún representante de las comunidades nativas y por lo tanto las demandas de los 10 mil indígenas que habitan este valle no están siendo escuchadas por el gobierno”, expresó a INFOREGIÓN Isabel Barboza.
En conversación con el noticiero Diálogo Ciudadano, de Infovrae, lamentó del mismo modo que muchos representantes de las organizaciones sociales y algunos alcaldesse dejen llevar por lo que llamó «proselitismo político electorero», al querer imponer en la agenda de negociaciones con el gobierno los cultivos ilegales de la coca, dejando los aspectos relacionados con el desarrollo humano y el apoyo a los productores cacaoteros y cafetaleros.
Asimismo, denunció que las autoridades no se han pronunciado con claridad y contundencia sobre la invasión de los territorios de las comunidades nativas por colonos, quienes llegan con la finalidad de depredar los bosques a través de la tala ilegal y la deforestación para ampliar los cultivos ilegales de la hoja de coca.
Debido a ello, adelantó que próximamente las máximas federaciones de comunidades nativas del VRAE – conformada por el OARA, la Central Ashaninka del río Ene (CARE), la Federación Ashaninka del río Ene (FARE), y las Comunidades Nomatsiguengas (CANUJA) – estarán viajando a Lima para que sus propuestas sean atendidas por el gobierno central.
Algunas de las demandas de las comunidades nativas del VRAE
En educación: Creación e implementación de instituciones educativas bilingües en las comunidades nativas asháninkas y machiguengas, capacitación oportuna a docentes en educación bilingüe intercultural y promoción de becas para los indígenas.
En relación con el territorio: Inmediata entrega de títulos de propiedad y reconocimiento de nuevas comunidades nativas con la finalidad de proteger sus tierras de los invasores. Rechazo del mega proyecto Pakitsapamgo en el territorio de la cuenca del Ene, pues afectaría el libre cauce de los ríos y causaría disminución de peces.
En salud: Implementación de infraestructura y personal de la salud en comunidades nativas, así como adecuación cultural para su tratamiento. Exigen que los gobiernos locales y el Ministerio de Salud inicien acciones concretas para descontaminar los ríos. Solicitan ser beneficiarios con el programa Juntos y otras programas sociales, como seguridad alimentaria y almuerzos escolares, principalmente para beneficiar a las madres gestantes, ancianos y niños huérfanos.
En medio ambiente: Mayor control de los recursos forestales, asistencia técnica para la venta de oxigeno, protección de la biodiversidad y áreas naturales protegidas, así como la implementación de proyectos de crianza de animales silvestres y peces para preservar las especies en peligro de extinción.
En el plan integral de reparaciones: Reparaciones colectivas e individuales para las comunidades que sufrieron la violencia política y reconocimiento directo a los ex combatientes ashaninkas y machiguengas contra el terrorismo.
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