Comunidad nativa de Saweto pide atención de sus servicios básicos

El defensor del Pueblo (e), Eduardo Vega Luna, saludó la decisión del Gobierno Regional de Ucayali (GRU) de aprobar la titulación de 78,000 hectáreas de tierras de la comunidad nativa de Alto Tamaya Saweto, en atención a los reclamos de los líderes indígenas asesinados en setiembre del año pasado.

Vega Luna recordó que la titulación es una demanda de muchos pueblos indígenas e hizo un llamado a acelerar la titulación de las comunidades nativas y campesinas del país.

“Para hacer valer su derecho a la propiedad comunal, estos deben superar innecesarios obstáculos administrativos. Eso debe cambiar», manifestó a INFOREGIÓN.

Para Eduardo Vega, “la tragedia ocurrida en Saweto evidencia la gran vulnerabilidad de la población indígena, amenazada constantemente por actividades ilícitas como el tráfico de tierras y la tala ilegal. El Estado debe evitar que dicha tragedia se repita”.

En tal sentido, Vega recordó que las viudas de los líderes indígenas Edwin Chota Valera, Leoncio Quinticima Meléndez, Francisco Pinedo Ramírez y Jorge Ríos Pérez le han solicitado se brinde mayor seguridad a su comunidad.

“Del mismo modo, es necesaria la construcción de un aeródromo que permita una adecuada conectividad con Pucallpa, así como la urgente atención del déficit de acceso a educación y salud”, agregó Vega Luna.

Por otro lado, dijo que la Defensoría ha recomendado que se culminen las acciones de identificación de uno de los restos de los dirigentes indígenas y se continúe con la búsqueda del cuerpo pendiente de ubicación.

«También es necesaria una mayor celeridad en la investigación y sanción para los responsables de las muertes”, señaló Vega.

El defensor del Pueblo concluyó indicando que, en atención a su mandato constitucional, ha remitido un informe a la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM), al Ministerio de Agricultura, al GRU y al Ministerio Público exhortando a cumplir con los diversos compromisos asumidos y corregir las circunstancias que permitieron que esta tragedia sucediera, con el propósito de prevenir su repetición.