La vasta amazonia peruana alberga a comunidades como Puente Piedra en la provincia de Leoncio Prado, Huánuco, donde su gente construye cada día el futuro, dedicándose por completo al cultivo del Café.
Sus suelos fértiles y ambiente fresco, sus casi dos mil metros de altitud generan las mejores condiciones para el cultivo del café, un producto que gracias al Programa de Desarrollo Alternativo, USAID Perú y Devida, ha transformado la vida de estos agricultores.
El medio ambiente y las prodigiosas manos de sus agricultores han creado una excelente asociación, hoy han logrado metas extraordinarias con una producción de 2,500 kilogramos por hectárea de café y se han convertido en una de las zonas más fértiles del país.
En Puente Piedra son 130 los agricultores que han mejorado su calidad de vida, son hombres, mujeres y niños que tienen un trabajo lícito y responsable y que abandonaron la hoja de coca por esta maravillosa planta que exportan gracias a instituciones como la Cooperativa Agraria Industrial La Divisoria.
Nuevas técnicas para mejorar calidad del grano
Ellos se consideran cien por ciento cafetaleros, pero aún así, las técnicas post cosecha que usan, todavía son rústicas, ocasionando que el café que obtienen pase por procesos que ocupan mayor tiempo, demorando su ingreso a los mercados de la zona.
Por ello, el proyecto presentado al Concurso Selva Ganadora es la Implementación de 30 módulos post cosecha para mejorar la calidad de sus granos de café.
Puente Piedra se encuentra ubicado en el distrito de Rupa Rupa, a 6 kilómetros del puerto de Alto San Juan de Tulumayo, Para llegar a esta comunidad se debe caminar entre 3 ó 4 horas en medio del Alto Huallaga por impresionantes parajes selváticos.
Las grandes distancias, obligan a los niños y niñas del lugar a caminar varias horas para llegar a su centro educativo. En la comunidad solo se imparte el nivel primario y cuentan con 25 alumnos en todos sus grados.
Puente Piedra es una comunidad que acoge a sus visitantes con gran hospitalidad, es un pueblo alegre, vital y solidario en donde los hombres, mujeres y niños están construyendo su propio futuro.
Gracias al café de calidad de exportación hoy tienen mejores condiciones de vida y sobre todo la esperanza de que su trabajo sea la fortaleza diaria de un puente que une el esfuerzo con el desarrollo de nuestro país.