Comunicaciones llevan desarrollo a Pampamarca

Wilder Encarnación Espinoza tiene 50 años de edad. Todos vividos en el centro poblado de Pampamarca, frente al futuro Complejo Hidroenergético de Pillao, en la ceja de selva de Huánuco. Toma su teléfono móvil y llama a sus familiares en la capital de la región o en Lima.

Lejos están los tiempos en los que existía un solo teléfono comunitario que apenas funcionaba, era costoso y para acceder a él había que hacer largas colas. Todo eso cambió con la llegada del proyecto que construye Odebrecht Perú, y que permite una mayor y más económica comunicación con todo el Perú y el mundo.

“Antes, para pasarle la voz a alguien, había que ir personalmente a donde fuera necesario, como un chasqui. Luego, con la llegada de la empresa, que trajo el servicio de telefonía móvil, y a solicitud de las comunidades, la cosa empezó a mejorar”, recuerda Wilder.

El servicio de telefonía móvil también ha ayudado al despegue económico de la localidad, especialmente de los restaurantes y pequeñas bodegas que, al mejor estilo de las ciudades más grandes, realiza la atención de pedidos por delivery.

Hoy Wilder se comunica todos los días, sin ningún inconveniente, con su hijo que estudia en Huánuco, y con su otra hija que vive en Lima. Les pregunta cómo están, coordina el envío de alguna encomienda y también recibe las buenas noticias de sus progresos.

“Gracias a la empresa que construye la hidroeléctrica, a Odebrecht, y también por la gestión de la municipalidad, es que hoy tenemos este apoyo tan importante para nosotros”, puntualiza Wilder.

Los comentarios están cerrados.