Compras secretas y monopolio en el mercado

Dos temas nos generan mucha preocupación: la noticia de que el Gobierno podrá adquirir bajo la modalidad de secreto militar 19 tipos de bienes y servicios en el ámbito militar y policial; y la idea del municipio de Lima de que en Lima solo debe existir un gran mercado mayorista. Lo primero invita a la sospecha y lo segundo a la preocupación.

Decir que la construcción de bases contrasubversivas, la adquisición de medicinas, o la compra del rancho tienen que ser secretas para darles seguridad a los postores o para hacerlas más rápido, no representa una verdadera razón para declararlas secretas. Los terroristas no buscan ni atacan las oficinas centrales de los proveedores o a sus ejecutivos, atacan las obras y las instalaciones, y secuestran a los trabajadores en la zona, en el campo. ¿Qué tiene que ver el proceso administrativo en Lima con la lucha en el Vraem?

¿Comprar helicópteros, medicinas y ranchos, o contratar las obras en secreto va a impedir que los terroristas o los narcotraficantes quieran atacar a las fuerzas del orden? ¿Acaso no es muy fácil para los pobladores de la zona saber qué empresas son las que construyen o proveen el servicio? ¿Los trabajadores, sus equipos y vehículos van a ser invisibles a partirde una compra secreta? Cuidado con Corea y otros proveedores más. Todo lo secreto «invita» a la arbitrariedad y a la corrupción, y el Perú ya lo vivió hace poco. ¿No era que con Ollanta se acababa todo eso?

Y en el caso del Mercado Mayorista de Santa Anita, creemos que es una mala señal que la alcaldesa diga que en Lima solo debe haber un Mercado Mayorista.

¿Porqué no puede haber un gran mercado en cada cono de Lima? ¿Por qué evitar que funcione el mercado y que los consumidores sean los grandes beneficiados con la competencia entre mayoristas y entre mercados? ¿Por qué promover monopolios?, ¿por qué ponerle límites a la venta de los productores de otras regiones, ya que Santa Anita tiene una capacidad que en algún momento será copada?.

Los hechos de aquel jueves de terror deberían hacerle vera la alcaldesa que estimularla generación de poder en un solo gran feudo le afecta su capacidad de negociación y de maniobra.

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