La prevención y atención de los incendios forestales que por estas fechas son una constante en el Valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE), podrían ser prevenidas y atendidas de forma oportuna, aseguró Carlos Sánchez Uriol, oficial del Cuerpo General de Bomberos Voluntarios del Perú (CGBVP).
“Sin estar constituidos como un cuerpo de bomberos en el VRAE, el cuerpo de Serenazgos de Pichari con apoyo del Ejército, el año pasado, logramos controlar una decena de incendios forestales producidos en nuestra jurisdicción de Pichari, lamentablemente no se puede decir lo mismo de otros distritos, es por ello que urge la necesidad de contar con una Unidad de Bomberos operativa que de cobertura a todo el VRAE”, indicó.
Sánchez Uriol, quien actualmente ocupa el cargo de Jefe de la División de Seguridad Ciudadana de la Municipalidad Distrital de Pichari, dijo que no sólo se tiene que lidiar con los incendios forestales sino también con los fenómenos de la naturaleza, “durante los meses de enero hasta a abril, esta zona es muy vulnerable a inundaciones por las lluvias torrenciales y la ubicación de las poblaciones en las márgenes y cauces de los ríos, originando pérdidas humanas, materiales, de flora y fauna.
De otro lado, indicó que en las carreteras de acceso al VRAE, los accidentes de tránsito suceden constantemente, los mismos que carecen de una estrategia clara para el rescate y recuperación de los cuerpos.
“El mal estado de las carreteras y la impericia de los conductores generan con frecuencia los accidentes de tránsito en las vías y carreteras de acceso al VRAE, incluso el riesgo se repite en las embarcaciones pluviales”, remarcó.
DATO
En el 2010, unas 145 hectáreas de bosques y tierras de cultivos fueron destruidas sólo en el distrito cusqueño de Pichari, en el Valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE) debido a los incendios forestales originados por la ausencia de lluvias, el intenso calor y las malas prácticas agrícolas.