Los cocaleros agrupados en torno a la Federación de Productores Agropecuarios del Valle del Río Apurímac y Ene (FEPAVRAE) decidieron suspender la entrega de hoja de coca al Estado, como una de las medidas de fuerza en el marco de la huelga anunciada para fin de este mes por la Confederación de Productores Agropecuarios de las Cuencas Cocaleras del Perú (CONPACCP).
Los campesinos insisten en que la Empresa Nacional de la Coca (ENACO) incremente la cantidad de hojas que acostumbra comprar a los campesinos de la zona del VRAE, así como mejores precios. Sin embargo, detrás de esta suspensión estaría la mano del narcotráfico, pues como los campesinos no se quedarán con la hoja en sus chacras, serán las mafias las que se beneficiarán con la mayor oferta del principal insumo de la pasta básica de cocaína.