“La característica principal de estas elecciones es hasta qué punto la población es indiferente con este proceso electoral. Solo cuatro de 10 personas están interesadas en los comicios. Además que solo el 25% está seguro de su voto”, dijo el exministro del Interior, Carlos Basombrío, en entrevista para el «Resumen Semanal InfoRegión» que conduce el periodista tingalés, Roberto Gálvez.
El exministro agregó que los electores tienen poco interés por las elecciones o no saben por quién votar; en ese sentido, consideró que los votantes están esperando una opción nueva, pero a la vez buscan castigar a toda figura política existente. Hay demasiadas incertidumbres para saber el resultado final, acotó.
Consideró que “estas elecciones están teñidas con la superposición de temas judiciales con temas políticos (refiriéndose a los casos de Keiko Fujimori, Ollanta Humala y Daniel Urresti)”. Como se sabe, la fiscalía pidió 30 años de prisión para Fujimori por el caso Lava Jato; Humala está siendo investigado por supuestamente favorecer a la empresa Odebrecht en el caso del Gasoducto; y Urresti estaría implicado en el asesinato de un periodista.
Ante esto, Basombrío considera que tal vez la postulación de esos candidatos que tienen juicios o investigaciones es buscar protección política en la hipotética situación de que salgan elegidos. Ya que, en los tres casos, el nivel de las acusaciones y pruebas son grandes. Además, él menciona que en el caso de Fujimori se podría utilizar una especie de victimización que podría llegar a influir en el electorado.
Sobre el candidato de Renovación Popular, Rafael López Aliaga, dijo que es «extremadamente conservador». Al respecto, consideró preocupante que alguien con esa manera de pensar llegue a la Presidencia de la República. Sin embargo, si bien existe un sector de la población que comparte esos pensamientos, expresó su esperanza de que no refleje el pensar de la mayoría.
Al ser consultado sobre las propuestas de seguridad ciudadana presentadas por los partidos en la campaña, dijo que estas son muy simplistas y que apelan al miedo de la gente. Consideró fundamental que se deba contar con una policía más moderna y menos corrupta, y con más elementos técnicos y científicos; todo ello con una política de prevención del delito.
Sobre la situación del Vraem, consideró que la estrategia a usarse tiene que ser de inteligencia de la mayor sofisticación, en vez de una de corte militar. Basombrío precisó que actualmente en el Vraem hay menos senderismo, sin embargo hay narcotráfico tan igual o peor que hace algunos años.