Científicos temen que el banco de hielo en el Ártico desaparezca en el 2023


El coordinador del proyecto europeo «Damocles», Jean-Claude Gascard, advirtió que el banco de hielo en el Ártico habrá desaparecido en el verano para el año 2023 si el deshielo veraniego continúa al ritmo actual, lo que ocasionaría importantes trastornos climáticos en Europa.


«Nos ha sorprendido la rapidez extrema con la que el hielo ártico se derrite en verano», afirmó Gascard hoy en «Le Parisien». Tras señalar que «se pierden 500 000 kilómetros cuadrados adicionales cada año», advirtió que «a este ritmo el banco de hielo en verano habrá desaparecido en 2023», mucho antes de lo previsto por el Grupo Internacional de Expertos sobre el Cambio Climático.


 


Gascard explicó que el verano pasado se podía alcanzar el delta de Lena en Siberia desde el de Mackenzie en Canadá, sin tropezarse con un solo bloque de hielo a la deriva, lo que va a inducir «una cascada de acontecimientos planetarios».


 


El retroceso espectacular del banco de hielo al final del verano fue constatado por los científicos de la goleta Tara, que forma parte del programa europeo «Damocles» y que inició su expedición por el Ártico en setiembre de 2006.


 


El proyecto «Damocles» busca mejorar la anticipación a los cambios originados por el calentamiento global terrestre en el Ártico y se enmarca en las actividades del Año Polar Internacional 2007-2008, informó la agencia Efe.


 


El banco de hielo en verano, que se extendía sobre 5.5 millones de kilómetros cuadrados hace dos años, ha perdido 1.5 millones de kilómetros, según los científicos de la misión. Además, el espesor medio del banco de hielo es ya sólo de 1.5 metros en lugar de los tres metros observados hace 30 ó 40 años, el hielo es «más joven», menos comprimido y se derrite más fácilmente.