Como parte de su estrategia en las llamadas «zonas cocaleras» de nuestro país, más de 500 padres de familia pertenecientes a 40 comunidades de la provincia de Leoncio Prado y el valle del Monzón se han beneficiado, en lo que va del año, con los talleres de orientación y capacitación que desarrolla el Centro de Información y Educación para la Prevención del Abuso de Drogas (CEDRO).
Gonzalo Falla, coordinador del Programa de Educación Familiar Integral (PEFI) de Cedro, no solo desarrolla las denominadas escuelas para padres que tienen como objetivo orientarlos en una adecuada crianza de sus hijos, sino que también les permite desarrollar algunos oficios.
“Nuestro trabajo es básicamente con los jóvenes de 14 a 29 años con el objetivo de promover el protagonismo de estos como agentes de cambio dentro de sus localidades a través de actividades lícitas, pero al mismo tiempo buscamos la participación activa de los padres de familia”, precisó.
Agregó que a través de estos talleres, los participantes han aprendido oficios como chocolatería, preparación de postres, confección de adornos, entre otras actividades, que ahora les permite tener una oportunidad de trabajo lícito.
“Lamentablemente, muchos de estos padres desertan de los talleres y abandonan la oportunidad de una alternativa de desarrollo y mejorar sus condiciones de vida, pero pese a ello hemos logrado beneficiar a un importante número en las 40 comunidades de Leoncio Prado y el valle del Monzón en las que tenemos influencia”, añadió. Asimismo, dijo que estiman cerrar el año duplicando las cifras de beneficiarios.