Califican como perjudicial que legislación peruana tipifique el maltrato y no el castigo a los niños

La representante de la asociación Save the Children en el Perú, Teresa Carpio, sostuvo que el Estado y las familias son los principales garantes de la niñez, por lo que deben impedir que trabajen y que sean maltratados o ultrajados por extraños e incluso por sus propios familiares.
 
Sin embargo, Carpio sostuvo que la ley que supuestamente debe proteger a la infancia presenta serios vacíos que deben ser subsanados.


«Lo que nuestra legislación tipifica es el maltrato o las acciones humillantes. Lo que no se encuentra señalado es el castigo, representado por jalones de cabello, golpes con reglas o insultos en público, eventos que son utilizados por profesores y padres de familia para *educar* en las aulas o en los hogares», sostuvo. 
 
Por ello, la especialista señaló que es necesario modificar esa norma, hecho que no busca penalizar ni enfrentar a los padres con los hijos, sino que pretende que la ley sea cumplida por familiares, profesores y tutores, en beneficio de la infancia. 
 
Dijo que la actual legislación es ambigua porque faculta a los padres a corregir «moderadamente a sus hijos». Y ciertamente, ni jueces ni autoridades ni policías saben qué puede entenderse como «moderadamente».
 
Carpio sostuvo que la ONU ha cuestionado esa falencia y ha señalado que debe ser remediada con celeridad.
 
La especialista de Save the Children señala que para evitar actos de mala conducta es fundamental el diálogo con los niños, incluso desde el vientre materno.


«Con una comunicación horizontal y fluida será más fácil instaurar posteriormente reglas de convivencia en casa y en la escuela» precisó.
 
Finalmente, Carpio dijo que las amenazas proferidas por los padres de familia tienen un efecto contrario, pues genera actitudes de rebeldía que son difíciles de afrontar.