La Comisión Nacional Para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida) trabaja de manera intensa en el valle del Monzón a fin de dejar completamente implementado el plan posterradicación de cultivos ilegales establecido en la Estrategia Nacional de Lucha contra las Drogas.
Según informó la presidenta ejecutiva de Devida, Carmen Masías, la situación de abandono que sufrió la zona durante los últimos cuarenta años empieza a cambiar ya que “en este momento” un equipo de ingenieros agrónomos está haciendo el respectivo análisis de suelos en las tierras que antes estaban destinadas a los cultivos de coca.
“Gracias a que en el lugar hay gente que quiere el cambio, se va a entrar con mil hectáreas de cacao. Cabe destacar que estamos hablando de entrar con desarrollo alternativo a un lugar que tiene 51% de pobreza total”, manifestó Masías.
En entrevista con INFOREGIÓN, la titular de Devida admitió, sin embargo, que en el valle hay resistencia de algunas personas a cambiar los cultivos de coca y apostar por productos alternativos como el café, cacao, palmitos, etc. “Pese a todo, tengo la esperanza en que la gente quiere el cambio, quieren pasarse a actividades legales más productivas como lo en San Martín”, señaló.
Al comentar el gran impacto causado por el IV Salón del Cacao y Chocolate, Masías confió en que el consumo nacional de este emblemático producto peruano se incremente cada vez más, “para lo cual se requiere campañas educativas e informativas”.