El Bosque de Protección del Alto Mayo está próximo a cumplir 30 de creación como Área Natural Protegida por el Estado peruano y el equipo de gestión junto a las familias que apoyan la conservación de sus 182 mil hectáreas, organizan actividades conmemorativas a realizarse el 22 de julio en Aguas Verdes y el 23 en Rioja.
“Con la participación de entidades estatales como la Red de Salud de Rioja, el Ejército peruano, la Policía Nacional del Perú, las municipalidades de Aguas Verdes, Rioja y Moyobamba; al igual que, con el apoyo de nuestros socios más cercanos como la COOPBAM, Conservación Internacional, ECOAN y el Comité de Gestión del BPAM haremos posible dos grandes eventos de confraternidad y civismo con el fin de celebrar 30 años de creación de una ANP que contribuye a la calidad de vida de la población en el Alto Mayo”, dijo Frank Oyola, jefe del BPAM.
Bajo el lema “BPAM, 30 años de conservación para nuestra vida”, la comisión organizadora ha programado para el 22 de julio, en el centro poblado Aguas Verdes, la realización de una feria de emprendimientos sostenibles, campaña médica, servicios informativos para el poblador, encuentro deportivo de confraternidad, show infantil y la premiación al mejor café del BPAM y el mejor tostado artesanal.
Con la misma dedicación, el domingo 23 de julio -día central- el equipo de gestión y organizaciones aliadas participarán del desfile cívico en la plaza principal de Rioja, se informó a INFOREGIÓN.
“La Cooperativa de Servicios Múltiples Bosques del Alto Mayo y sus 280 socios está muy contenta de apoyar en la celebración de esta fecha importante para todos los que vivimos mejor, gracias a la conservación del BPAM. Este 22 nos uniremos a la jefatura del ANP y las organizaciones comprometidas con el desarrollo local para festejar los 30 años del Bosque de Protección más grande del país”, dijo Idelso Fernández, gerente de la COOPBAM.
Además de ser el origen de las cuencas que proveen agua a más de 250 mil habitantes en el Alto Mayo, el BPAM alberga una amplia diversidad biológica y es el sustento directo de vida de más de 1500 familias asentadas en su interior.
Desde el año 2011, gran parte de estas familias son suscriptoras de Acuerdos de Conservación, un compromiso voluntario por el que se recuperan los bosques a partir de actividades económicas compatibles y amigables con el ambiente, de modo que los recursos naturales; especialmente, el agua, continúen disponibles.