El analista en temas de narcotráfico, Rubén Vargas, opinó hoy que no habrá recorte alguno en los recursos que Estados Unidos destina a la lucha antidrogas en América Latina.
Dijo que esto será así, pues el gobierno norteamericano sabe que este problema no es solo local, sino que afecta a la democracia de los países productores y a sus propios ciudadanos.
Como se recuerda, la ex directora de la Oficina en Washington de Asuntos Latinoamericanos (WOLA), Colleta Youngers, afirmó que es probable que los recursos para la lucha antidrogas en América Latina disminuyan y se apoyen, en cambio, los programas de desarrollo económico.
«No creo que la ayuda americana o la cooperación internacional a la lucha antidrogas disminuya de manera ostensible. El tema de las drogas ya no es visto como un problema local de un país, sino internacional, porque afecta a la seguridad y a la viabilidad de la democracia. No creo que haya una disminución importante en la administración de Barack Obama», resaltó Vargas en el portal web del diario El Comercio.
Obama quiere tener un papel más activo en América Latina
Más adelante, el especialista recalcó que el nuevo subsecretario de Estado estadounidense, James Steinberg, dijo en su audiencia de confirmación ante el Senado que el nuevo gobierno tiene intenciones de tener un papel más activo en América Latina, lo que incluye la lucha contra el narcotráfico.
En ese sentido, Vargas destacó que este tema es el más complicado y delicado en esta región.
Del mismo modo, subrayó que el Perú tuvo logros interesantes en el 2008 en el tema de la erradicación de la hoja de coca ilegal, que llegó a cerca de 10 mil hectáreas, y la incautación de clorhidrato y pasta básica de cocaína.
Sin embargo, precisó que se necesita hacer un mejor trabajo en el decomiso de insumos químicos y en la investigación sobre lavado de activos, además de que el Estado debería hacer mayores esfuerzos para promover el desarrollo alternativo en las zonas cocaleras.
«Sería la intervención más directa que pueda dar el Estado frente a este problema y, por supuesto, es muy importante que se invierta en las zonas productoras de coca ilegal, en la medida que el narcotráfico y el terrorismo aprovechan esta ausencia o debilidad en las instituciones del Estado», puntualizó.