Treinta personas desaparecidas, la mayoría de ellos niños, centenares de viviendas desaparecidas y más de dos mil damnificados sería hasta el momento el saldo de una avalancha de lodo en el distrito de San Ramón, provincia de Chanchamayo, región Junín, como resultado del violento desborde de los ríos, Tulumayo, Chanchamayo y Huaytará.
En horas de la mañana el presidente regional de Junín, Vladimiro Huároc, reportó diez muertos tras una inspección que efectuó en la zona del desastre, pero en la tarde la alcaldesa de la provincia de Chanchamayo, Liv Haug Landmo, advirtió que se teme que los desaparecidos por las inundaciones lleguen a 30.
La burgomaestre señaló que muchos de los desaparecidos serían niños que dormían en sus casas cuando el agua irrumpió con fuerza sin darl tiempo a los padres para ponerlos a salvo y aseguró que ya el personal de la Compañía de Bomberos, Policía Nacional y Defensa Civil trabajan de forma conjunta en el rescate de los desaparecidos.
Al igual que el presidente regional, la alcaldesa de Chanchamayo Liv Haug Landmo formuló un llamado al Instituto Nacional de Defensa Civil (INDECI) y al gobierno central, para que envíen de inmediato helicópteros con ropa, colchones y víveres que requieren los pobladores damnificados. «Necesitamos urgente ropa, alimentos, frazadas y colchones para los afectados» pidió.