Líderes indígenas, miembros de la sociedad civil y de los gobiernos locales, y funcionarios de Inrena acordaron adoptar una estrategia conjunta para frenar la construcción ilegal de la Vía Pichis a través del Bosque de Protección San Matías-San Carlos (BPSMSC) por poner en riesgo la dotación de agua, la estabilidad ecológica y los territorios indígenas en la cuenca del río Pichis.
Asimismo, enfatizaron la gravedad del caso pues paralelamente a la construcción ilegal de la carretera, algunos grupos organizados en Pichanaki vienen promoviendo la invasión de tierras dentro del Bosque de Protección, aduciendo que éste ya no existe.
Según informa la revista Viajeros On Line, la decisión de adoptar una estrategia conjunta fue tomada en días pasados en la ciudad de Villa Rica (provincia de Oxapampa) en el marco de un taller preparatorio para la presentación oficial de la futura Reserva de Biósfera Oxapampa-Asháninka-Yánesha.
En dicho evento participaron autoridades de la provincia, dirigentes de federaciones indígenas, funcionarios de Inrena y miembros de la sociedad civil como la Asociación para la Conservación y Manejo de la Reserva Comunal Yanesha (AMARCY), ECOSIRA, Conservación Internacional, ProNaturaleza y el Instituto del Bien Común.
Los alcaldes de Puerto Bermúdez (Pasco) y Pichanaki (Junín) son los principales impulsores de esta carretera que pretende unir ambas localidades cruzando el Bosque de Protección San Matías-San Carlos. Sin embargo, esta construcción no cuenta con estudios de impacto ambiental ni los permisos respectivos del Inrena ni del Ministerio de Transportes y Comunicaciones sobre todo al cruzar un área natural protegida.
Para evadir la necesidad de realizar los estudios técnicos necesarios se viene haciendo pasar esta obra de impacto regional como una serie de carreteras vecinales aprovechando el dinero que reciben por el canon minero.
Pero gracias a una ardua campaña de la sociedad civil, se ha sensibilizado a las poblaciones de esos lugares sobre las negativas repercusiones de la construcción de esta carretera y la Comisión de Pueblos Indígenas, Andinos, Afroperuanos, Ambiente y Ecología del Congreso y el Ministerio del Ambiente han apoyado las gestiones para detener la construcción de la carretera ilegal desde el lado de Puerto Bermúdez.
Estas acciones han conducido al mandato de detención dictado por la Fiscalía de Oxapampa contra el actual alcalde de Puerto Bermúdez, Nemesio Viriochi, por delitos de colusión desleal, omisión a la denuncia, incumplimiento de deberes y cobros indebidos, relativos a compra de maquinaria pesada para la construcción de la carretera y valorada en 13 millones de soles.
La Asociación de Nacionalidades Asháninkas del río Pichis (ANAP), los alcaldes de Oxapampa y Villa Rica y miembros de la subgerencia de Pasco en Oxapampa, lideran las gestiones para promover la alternativa a la construcción de la Vía Pichis, principalmente el mejoramiento, y potencialmente el asfaltado de la ruta existente entre Villa Rica y Puerto Bermúdez, sin necesidad de construir carreteras nuevas.