Desde el 09 de diciembre, cientos de trabajadores mineros asociados a la Federación Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Siderúrgico del Perú – FNTMMSP, iniciaron un paro indefinido, llegando hasta Lima, para denunciar que las empresas mineras que operan en el país habrían aplicado suspensiones perfectas y ceses colectivos irregulares. Además, exigen una mayor fiscalización, pues, debido al contexto de la pandemia, los reportes de contagios por COVID19 de trabajadores mineros ha llegado a índices muy altos.
Esta situación ha sido denunciada por muchos sindicatos a lo largo de la cuarentena, pues las jornadas de trabajo eran atípicas y las empresas no se estaban preocupando por respetar los protocolos mínimos de bioseguridad, afectando a trabajadores, sus familias, y a las comunidades, aumentando el número de contagios.
Hasta la fecha, la federación continúa en paro indefinido, habiendo realizado plantones en los exteriores de diferentes instancias gubernamentales como el Ministerio de Trabajo, el Ministerio de Energía y Minas y el mismo Congreso de la República., sin embargo, el gobierno de transición aún no atiende sus demandas, a las cuales se van sumando diferentes sindicatos de todas las regiones del país.
Durante los últimos días las protestas se van sumando en diferentes regiones, denunciando excesivos horarios de trabajo y que las empresas están apostando por una política de tercerización, negando derechos laborales a los trabajadores.
Las protestas reportadas en contra de las empresas y unidades mineras desde los primeros días de paro fueron Shouxin Perú, Nexa Atacocha, Contonga, y se han ido sumando Huanzala, Master Drilling, Barrick. San Rafael, Glencore, entre otras.
Fuente: Conflictos mineros