Según un informe de la Dirección Antidrogas de la Policía Nacional, el número de ‘correos vivientes’ (burriers) de la droga que caen detenidos en los operativos de la Policía Nacional en el aeropuerto internacional Jorge Chávez se ha incrementado notablemente, debido al aumento de la demanda de cocaína en Europa y los Estados Unidos.
El reporte señala que de enero a abril del presente año fueron detenidos 166 “burriers” (118 hombres y 48 mujeres) en el aeropuerto de Lima que pretendían salir con 743 kilos de clorhidrato de cocaína. Una cifra bastante superior a la del 2009 en similar período.
Para el coronel PNP (r) Carlos Pércovich Mallea, autor del libro “Lavado de activos”, el aumento de estas detenciones se debe a que el mercado de cocaína se ha ampliado a Europa, Asia y Rusia (ya no solo a Estados Unidos), pues esta droga viene sustituyendo poco a poco a la heroína en esos lugares.
“Los consumidores prefieren la cocaína porque no deja estragos*. Un cocainómano puede laborar al día siguiente de haberla ingerido. En cambio la heroína deja secuelas por cuatro días y en ese lapso el consumidor deja de trabajar, por eso la inclinación a la cocaína”, explica Pércovich.
El oficial en retiro señala que la modalidad del “burrier” es solo una de las formas del narcotráfico internacional para sacar droga de nuestro país. “La modalidad de transportarla en barco es otra en donde se lleva volúmenes mucho mayores, pero los “burriers”, de a pocos, concentran alijos importantes”, afirmó.
De acuerdo con su experiencia —él trabajó en la Dirección Antidrogas—, por cada “burrier” que es detenido, salen más de nueve con estupefacientes. “La mafia siempre ha utilizado carnadas, pues es inescrupulosa. Es capaz de quemar a uno de sus miembros para que otros 10 o más puedan salir sin problemas”, afirma.
Según el coronel (r) PNP Esteban Saavedra Mendoza, quien también laboró en la Dirección Antidrogas, el tema de los “burriers” ha sido considerado como un desvío de atención, es la *contrainteligencia de los narcos. “Sacrifican a uno y salen otros más”, comentó.
Actualmente, son 50 los agentes antidrogas que vigilan la posible salida de “burriers” en el aeropuerto Jorge Chávez, pero solo hay 20 por turno de ocho horas. Esto lleva a que no más del 10% de pasajeros que sale del país sea sujeto a una revisión.
Estimados no oficiales señalan que del Perú salen anualmente unas 280 toneladas de cocaína al exterior. De esa cifra, la policía solo llega a decomisar el 10%.
Si se considera que cada noche de temporada baja salen del Perú unos cuatro mil pasajeros en 15 vuelos internacionales —según la Dirección de Migraciones—, se puede deducir que el número de agentes es insuficiente.