Durante el evento internacional Perú Remedia, el Ministerio de Energía y Minas (Minem) reveló que a la fecha el Perú cuenta con 3231 pasivos ambientales generados por los hidrocarburos, siendo 152 de ellos de alto riesgo. Según el Minem, la falta de regulación entre 1863, año en que se ejecutó la primera explotación petrolera en el país, y 1993 es una de las principales causas de esta problemática que está afectando a comunidades de Loreto, Piura, Tumbes y Puno.
El evento convocado por Profonanpe, el fondo ambiental del Perú, sirvió como un espacio para fortalecer el contacto con las comunidades nativas de la Amazonía peruana afectadas por estos pasivos ambientales, así como para reflexionar y conocer experiencias internacionales en remediación de zonas impactadas por los hidrocarburos. Esto con miras al proceso de rehabilitación que viene implementando Profonanpe, en el marco del Fondo de Contingencia para la Remediación Ambiental.
En sus intervenciones, los representantes de las comunidades originarias de las cuencas del Pastaza, Corrientes, Tigre y Marañón, de la región Loreto, aprovecharon en mencionar los graves problemas de salud que vienen atravesando los ciudadanos de estas zonas, debido a los pasivos ambientales.
“Años de explotación petrolera y ningún gobierno de nuestro país, ni ministro, ni instituciones se han preocupado en defender nuestros derechos como cualquier ser humano”, señaló el Apu Aurelio Chino, presidente de Federación Indígena Quechua del Pastaza (Fediquep). En ese sentido, el Apu Alfonso López, presidente de la Asociación Cocama de Desarrollo y Conservación San Pablo de Tipishca (Acodecospat), pidió hacer una «interpretación intercultural» del término remediación para «cumplir con las expectativas de los pueblos indígenas» y exhortó a las autoridades a que implementen normas claras que permitan el avance de Profonanpe.
Asimismo, el Apu Omar Saquiray, presidente de la Federación de Comunidades Nativas de la Cuenca del Corrientes Federación de Comunidades Nativas de la Cuenca del Corrientes (Feconacor), relató cómo antes los pueblos indígenas de la zona “vivíamos sanos y no teníamos ningún problema ni malestar»; sin embargo, hoy en día todos, debido a la explotación de hidrocarburos «los que vivimos en esa zona tenemos plomo en nuestra sangre».
En consecuencia, el Apu Maguen Majipo, vicepresidente de la Federación de Comunidades Nativas del Alto Tigre (Feconat), insistió en que el proceso avance más rápido. «La expectativa es que se vea una remediación buena a futuro y que las empresas nos brinden tecnología para realizarla», apuntó.
Anton Willems, CEO de Profonanpe, destacó la importancia de este evento que permitió a los asistentes continuar escuchando a las comunidades; “Qué importante es aprender de las comunidades que, día a día en el campo, conocen mejor que nadie la repercusión de los hidrocarburos. Su impulso es muy importante para que el trabajo para la conservación no se detenga”, indicó.
«Desde Profonanpe sabemos que tenemos una tarea pendiente, pero también es importante reconocer que se han dado grandes avances a nivel de preocupación del Estado y diversos sectores. Esta preocupación por remediar efectivamente los sitios impactados son el camino para avanzar», agregó Willems.
El viceministro de Gestión Ambiental del Minam, Mariano Castro, destacó que en la medida de que los procesos de remediación sean exitosos los ciudadanos y ciudadanas de las zonas afectadas tendrán la posibilidad de desarrollarse en un ambiente equilibrado; sin embargo, indicó que para lograrlo es importante la voluntad política, la asignación de recursos e identificar buenas prácticas.
Por su parte, el titular del Ministerio de Energía y Minas (Minem), Jaime Gálvez, valoró la alianza de su cartera con Profonanpe, el fondo ambiental del Perú, para trabajar en conjunto para la remediación de los sitios impactados por los hidrocarburos.
«Todos los países del mundo estamos en un proceso de transición energética; sin embargo, no será rápido porque no es fácil sustituir a los hidrocarburos. Hemos tenido controles ambientales insuficientes. La alianza con Profonanpe nos permite tener la remediación de sitios impactados por los hidrocarburos y de zonas de la selva que no han tenido un tratamiento ambiental adecuado», señaló Gálvez en su alocución.
Asimismo, la experta venezolana en remediación, Carmen Infante, contó parte de la experiencia de éxito del país sudamericano y resaltó a los asistentes del evento la importancia de continuar trabajando en favor del ecosistema. «Es importante devolver la salud al suelo dañado de la selva y así recuperar el ecosistema, que conlleva a reconstruir sus espacios ecosistémicos», señaló.
También los expertos internacionales invitados coincidieron en señalar que para remediar se requiere de constantes estudios, pilotos y cumplimiento de estándares y que la tecnología puede ser un gran aliado, dependiendo del ecosistema, siempre y cuando se persista en el aprendizaje, en la adecuación, pero -sobre todo- en el consentimiento de la comunidad para implementarla, se informó a INFOREGIÓN.