Aseguran que en el Monzón no hay ‘pishtacos’ y que asesinato de agricultor es caso aislado

El tema de las 60 supuestas víctimas de los  “pishtacos”,  una banda organizada que operaba desde el Monzón y que fuera anunciado con gran despliegue por la DIRINCRI  de Lima, se ha reducido con el paso de los días  a un solo caso que además aún falta esclarecer.

Para los oficiales de la División Policial del Alto Huallaga, quienes pidieron no revelar sus nombres para evitar problemas con sus superiores en Lima, la presencia de “pishtacos”  en la zona del Monzón es un hecho no creíble y aseguran que el asesinato del agricultor Abel Matos Aranda es solo un caso aislado cuyo móvil aún falta esclarecer.

“A nosotros nos tomó por sorpresa la llegada de la policía de Lima porque no fuimos avisados y menos informados del caso que los traía por acá. Escuchar en la conferencia de prensa  que  en el Monzón operaba una banda organizada de “pishtacos” nos extrañó porque como policías sabemos que no es cierto”, explicó un agente de  inteligencia de la región policial del Alto Huallaga, según publicó el diario La República.

El diario consigna que ya días atrás el propio jefe del  Frente Policial del Alto Huallaga, el  general PNP Luis Valencia Hirano, había asegurado que en su jurisdicción no había denuncias de desaparecidos y menos en la proporción que detalló el jefe de la DIRINCRI, general Eusebio Félix Murga, sobre una presunta red que habría asesinado a 60 campesinos para extraerles grasa.

El coronel PNP William Montenegro Vílchez, de la Región Huallaga, indicó por su parte que como acción a la denuncia policial en Lima se abriría una investigación en la zona para ubicar las identidades de los desaparecidos.

“Fue una sorpresa para el personal que trabaja acá porque no había comentarios ni temores al respecto, pero igual vamos a abrir una investigación y para eso hemos pedido información a la unidad especializada (en Huánuco) porque aquí solo hay denuncias de jóvenes y esposos que dejan sus casas por problemas familiares o sentimentales y que luego retornan, pero la familia no levanta la denuncia”, aclaró.

Buscando cifras exactas

De acuerdo con información oficial de la Policía, en lo que va del año en el Monzón solo se han registrado dos asesinatos: el de Abel Matos Aranda, el campesino de 27 años que hasta ahora es la única víctima confirmada de los denominados “pishtacos” y el de un hombre no identificado quien fue asesinado a balazos por Sendero Luminoso a inicios de año a la altura del  Puente Rondos, en el ingreso al valle.