El Ministerio de Salud (Minsa) aprobó una guía técnica para el cuidado de la salud mental de la población durante el aislamiento social obligatorio decretado por el Gobierno debido al Covid-19. El objetivo es establecer los criterios técnicos y los procedimientos para el cuidado de la salud mental de la población más afectada.
Mediante la Resolución Ministerial Nº 186-2020-Minsa, esta guía sostiene que las personas experimentan emociones negativas como respuesta natural a esta situación de pandemia. Los malestares pueden ser ansiedad, temor, tristeza, preocupación, cambios en el apetito y sueño, especialmente si no satisfacen sus necesidades básicas y no cuentan con redes de soporte social. Por tanto, no deben considerarse como una enfermedad, sino como reacciones emocionales intensas en una situación anormal que requieren ayuda.
El documento establece como prioridad la identificación activa de problemas de salud mental en personas con Covid-19, así como en aquellas que se encuentran en aislamiento domiciliario, familiares y población en general. Asimismo, determina que todas las Instituciones Prestadoras de Salud (Ipress) públicas y privadas deben incorporar el cuidado de la salud mental en sus planes y estrategias de intervención frente a la pandemia.
También, determina que es responsabilidad de todas las instituciones de salud quienes tienen que implementar, capacitar, conducir, supervisar y monitorear las disposiciones de la guía técnica, así como garantizar el abastecimiento y la distribución de medicamentos para el diagnóstico y cuidado de la salud mental de pacientes Covid-19. Además de la supervisión del seguimiento clínico del cuidado de la salud mental a distancia y presencial de las personas en aislamiento.
Finalmente, precisa procedimientos para fomentar el autocuidado de la población, identificando los problemas de salud mental en el contexto del Coronavirus, como son la reacción a estrés agudos, ansiedad, depresión, violencia hacia las mujeres, entre otros. Así como dar pautas para el acompañamiento psicosocial a los familiares de personas fallecidas por el Covid-19.