La carta de la Asociación de Derechos Humanos, APRODEH al Parlamento Europeo, contraria a considerar al MRTA como movimiento terrorista, ha facilitado el trabajo a los interesados en mellar el prestigio de la causa de los derechos humanos en el país y por ello requiere una inmediata rectificación ante el Consejo Europeo, entidad ejecutiva que definirá este asunto.
Así opinaron analistas como Augusto Álvarez Rodrich, director de Perú 21 y la columnista Rosa María Palacios, posición similar a la reseñada hoy en un editorial del diario El Comercio.
El director de Perú 21 consideró que la carta de APRODEH al Parlamento Europeo contiene un grave error.
Si bien puntualiza que “en ninguna parte de la misiva se niega la naturaleza terrorista del MRTA”, señala que la respuesta dada carece de la contundencia exigida aun para un grupo terrorista que pudiera estar extinguido.
Fujimori el beneficiado
“Se debe usar la misma energía, claridad y contundencia para condenar toda violación de los derechos humanos, venga de donde venga” sostuvo Alvarez Rodrich para quien el error de APRODEH es especialmente peligroso por “la existencia de un bloque político, en el que destacan el Apra, el fujimorismo y un sector de Unidad Nacional, que tiene escaso apego por los derechos humanos y que busca debilitar a todas las ONG con argumentos que son deleznables e interesados”.
En ese sentido advierte que el gran beneficiado de todo este asunto es el ex presidente Alberto Fujimori, procesado por delitos de lesa humanidad y violación de los derechos humanos.
“La carta le ha facilitado el trabajo a los interesados en mellar el prestigio de la causa de los derechos humanos, ya sea porque no creen en ella o, sencillamente, porque esto les sirve para la defensa de Alberto Fujimori. Para ellos, la votación de la UE les cayó como anillo al dedo” precisa.
Consenso en la defensa de los derechos humanos
Por su parte la periodista y abogada Rosa María Palacios resaltó que el asunto de la carta de APRODEH es consecuencia de dos errores que cometieron las asociaciones de derechos humanos desde su fundación, el primero de ellos, enfrentarse con fuerza al Estado y con tibieza a los movimientos terroristas.
Y, segundo, ser copados por los partidos de izquierda que se “apropiaron de la marca derechos humanos”, confundieron sus agendas políticas y negaron la defensa de los derechos de todos.
Tras considerar que esta situación ha originado que no haya consenso en el país en la defensa de todos los derechos, Palacios cuestiona al organismo de derechos humanos que haya preferido la agenda política de coyuntura a un asunto de Estado.
Por ello, reclama a APRODEH que se reivindique con su historia y le pida al Consejo Europeo, en donde se define finalmente la primera opinión del Parlamento Europeo, que incluya al MRTA, como movimiento terrorista, aunque no haya disparado una bala en 10 años. “Hacerlo favorecería ese consenso que hoy es esquivo” precisa.
En el mismo sentido editorializa el Diario El Comercio, que, al igual que los columnistas citados, lamenta que APRODEH haya contribuido con su opinión, a la decisión del Parlamento Europeo de excluir al MRTA de la lista de movimientos terroristas y le pide un inmediato descargo para revertir esta posición, que si bien no es vinculante ni definitiva, puede ser considerada un revés para la diplomacia peruana.