El presidente del Gobierno Regional Ancash, César Álvarez Aguilar, reiteró que solicitará una indemnización para la población de Santa Rosa, en la provincia de Bolognesi, afectada por el derrame de concentrado de cobre por la rotura del mineroducto de la compañía Antamina, ocurrido el pasado 25 de julio.
Esta aseveración la hizo este mediodía durante una reunión en Lima con el ministro de Energía de Minas, Jorge Merino Tafur, a la que asistió en compañía de autoridades y dirigentes de la comunidad de Santa Rosa, afectada por el derrame de cobre concentrado.
“En este proceso es importante que el Estado, a través de sus entidades fiscalizadores, y en diálogo con las autoridades regionales y con la población, esté para fiscalizar y, si hubiera infracción, estamos para sancionarlos”, anotó el ministro de Energía y Minas, Jorge Merino.
Por su parte el presidente regional de Ancash señaló que exigirá el pago de una indemnización a cada uno de los pobladores afectados. Asimismo, dijo que pedirá al Congreso de la República que se apruebe el decreto donde las zonas afectadas recientemente también formen parte de la zona minera riesgo. “Yo pido a los congresistas vean el tema de las zonas afectadas para que sean incluidas dentro de las zonas de riesgo de la mina ya que por debajo de Bolognesi y otros poblados pasan las tuberías de minerales, las carreteras a Antamina y la electrificación”, señaló César Álvarez.
“La compañía minera será sancionada por no haber tenido activado su Plan de Monitoreo y Contingencia, lo que ocasionó que se produjera el derrame en la estación de válvulas del mineroducto VS1. El Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA), adscrito al Ministerio del Ambiente (MINAM), será el encargado de concretar el cumplimiento de esta multa”, precisó la autoridad regional.
Como resultado de la emergencia, registrada el pasado 25 de julio, decenas de pobladores afectados presentaron fuertes dolores de cabeza, náuseas, ojos irritados y sangrado nasal.
Álvarez manifestó que Antamina está cumpliendo con la atención médica de los pobladores afectados, y se espera un mayor compromiso de sus funcionarios para hacer un seguimiento del trabajo que desarrollan en la mina.
“He pedido a la empresa que haga una supervisión general de sus sistemas de tuberías, que tienen más de 10 años de antigüedad, para evitar otra fuga de minerales y poner nuevamente en riesgo la salud de las personas”, enfatizó.
Por otro lado se han confirmado que de los 200 pobladores que viven en el caserío de Santa Rosa, 158 están siendo tratados en los distintos hospitales de los cuales algunos de ellos ya han sido trasladados a Lima. En las próximas horas el presidente regional de Ancash se entrevistará en Lima con los máximos representantes de la compañía Antamina.
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