El Centro de Conservación, Investigación y Manejo de Áreas Naturales – Cordillera Azul (CIMA-Cordillera Azul) presentó una sistematización de su experiencia con un proyecto de Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación (REDD) como mecanismo para financiar las acciones de conservación de la integridad de los bosques del Parque Nacional Cordillera Azul.
Esta área natural protegida está ubicada entre los departamentos amazónicos de Loreto, San Martín, Huánuco y Ucayali; y es gestionada por el CIMA-Cordillera Azul mediante un Contrato de Administración con la autoridad nacional, el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp).
Patricia Fernández-Dávila, directora ejecutiva de la institución dijo a INFOREGIÓN que “para asegurar la sostenibilidad a largo plazo del Parque Nacional en 2007 iniciamos la formulación de un proyecto REDD para conservar los bosques, la biodiversidad y fijar el carbono en los bosques de Cordillera Azul”.
“Estas acciones realizadas con participación del Sernanp nos ha permitido ayudar a la mitigación del cambio climático, generando beneficios para mejorar la calidad de vida de las poblaciones vecinas al área protegida y por lo tanto beneficiando a la población mundial”, agregó.
La implementación del Proyecto REDD en Cordillera Azul -que cuenta con el apoyo técnico del Field Museum de Chicago- se encuentra en su etapa inicial y tiene previsto involucrar con mayores acciones a las poblaciones y autoridades locales de estas regiones.
De igual manera se involucrará a diversas organizaciones que vienen sumando sus esfuerzos para conseguir financiamiento mediante los créditos de carbono que permitan asegurar la conservación real de estos bosques ubicados en la cadena montañosa más oriental de los Andes peruanos.
DATO
La Fundación Gordon and Betty Moore destaca en su informe final de 2013, que el Parque Nacional Cordillera Azul mantiene una tasa cero de deforestación con el 99.97 % de sus bosques conservados de forma intacta.
Estas cifras se complementan con los datos oficiales que indican que la cobertura forestal del Perú es alrededor de 73 millones de hectáreas, equivalente al 60 por ciento de su territorio y la tasa de deforestación se anota en 0.15 por ciento que parece baja, pero representa casi la mitad de la emisiones de gases de efecto invernadero en el país.
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