Alrededor de 780 indígenas se encuentran refugiados en la parroquia y el centro de salud de Bagua Grande, Amazonas, a la espera de ser trasladados a sus comunidades, luego que ayer se dieran los últimos hechos violentos en la ciudad que dejaron como saldo 22 policías y 27 indígenas muertos, según se conoce hasta el momento.
Informaciones procedentes de la zona, dan cuenta que unos 480 indígenas de la etnia awajun se encuentran en la Casa Parroquial de Bagua Grande, a cargo del Padre Castinaldo García Ramos, quien se ofreció como garante para albergar a los nativos que en el momento de la desesperación se metieron a las casas de los pobladores de la ciudad, tratando de protegerse de la violencia.
Asimismo, se conoce que otro grupo de 300 indígenas están en el Centro de Salud El Milagro de Bagua Grande, también a la espera de ser trasladados a sus comunidades, en los volquetes y demás unidades móviles que la comuna local ofreció para este fin.
Como la ciudad se encuentran en estado de emergencia, las informaciones que llegan de la zona no son confirmadas. Entre ellas se señalaba por ejemplo que ayer por la tarde los efectivos militares llegados a la zona ingresaron a las casas de los pobladores buscando indígenas para detenerlos.
Ante esta situación, y como no hay garantías, el Padre Castinaldo García ofreció la casa parroquial para que los nativos se refugiaran, fue entonces que durante casi dos horas, los pobladores llegaron en mototaxis a la parroquia para dejar a salvo a los nativos.
Tensa calma
En la noche de ayer, efectivos de la Dirección Nacional de Operaciones Especiales DINOES, ingresaron a la casa pastoral para buscar armas, pero no encontraron ningún tipo de armamento en poder de los indígenas.
Sin embargo las versiones periodisticas hablaban que se había encontrado 18 cacerinas, 5 cascos, 5 fusiles AKM, chalecos, uniformes policiales, correas, pistolas, bombas lacrimógenas, jebes, hondas y cuchillos, puntas de acero para lanza, 12 cartuchos y ropa civil ensangrentada.
Personal de la Defensoría del Pueblo se encuentran en la zona para mediar en la situación y tratar de evitar nuevos enfrentamientos.
Desconcierto en la zona
La información que se maneja en Bagua es que siete indígenas fueron detenidos la madrugada de hoy durante el toque de queda oficial, por habérseles encontrado armamento en su poder, como fusiles AKM y uniformes. Tres nativos están en Bagua Chica y cuatro en Bagua Grande.
Hasta el cierre de esta edición, se conoce oficialmente la muerte de veintisiete indígenas, porque el acceso a la zona de “La Curva del Diablo”, o la “Estación 6” para realizar investigaciones de más pérdidas o desaparecidos ha sido bloqueado totalmente por la policía.
Asimismo, permanecen 25 nativos heridos, de los 52 que llegaron el viernes, según informó el director del Hospital de Apoyo de Bagua, doctor José Serquén, quien dijo que la mitad de ellos recibieron el alta médica respectiva, por la poca gravedad de sus lesiones; mientras que los restantes se recuperan en un 60 por ciento.
Extraoficialmente, se dice que los familiares de los indígenas llevaron sus cadáveres a sus localidades pues no quisieron que les realizaran autopsia, debido a tradiciones propias de sus pueblos en tanto que otras versiones precisan que algunos nativos habrían sido arrojados al río.
También en la comunidad Nezaret, en Condorcanqui, están a la espera que el Apu aparezca, pues el día del enfrentamiento salió de su comunidad con 42 integrantes, de los cuales solo regresaron diez. Es difícil tener cifras oficiales porque los líderes de las comunidades son no habidos en estos momentos debido a la situación de emergencia que se vive.
Toque de queda
Desde ayer a las 3 de la tarde personal del Ejército Peruano llegó a la ciudad de Bagua para encargarse de la situación de emergencia decretada. Habría en la zona alrededor de 200 militares en Bagua, según informó a INFOREGIÓN el periodista radial Flavio Flores.
Los efectivos militares, en grupos de dos o tres, patrullan la ciudad y a partir de las 6:00 p.m. hasta las 6:00 a.m., utilizando altavoz advierten a los habitantes que se queden en sus casas por el toque de queda y precisan que todo el que sale será detenido.
Las calles de Bagua Grande, Bagua Chica, Jaén, San Ignacio, Condorcanqui, están desiertas, ocasionando el malestar entre los ciudadanos, pues Bagua es conocida como zona comercial y esta situación de emergencia, calificada como innecesaria, les genera cuantiosas pérdidas económicas cuantiosas.
Hoy por ejemplo, el mercado municipal ya lucía abastecido con los productos de primera necesidad, luego de la escasez que generó por casi dos meses el bloqueo de la carretera Fernando Belaunde, sin embargo, los precios se han incrementado notoriamente.
El pollo se vende a S/. 10 el kilo, cuando su precio normal era S/. 7.50; el huevo a S/. 3.50 el kilo; la papa y el camote a S/. 1.00 el kilo; mientras que el gas a S/. 33 por balón. Según los comerciantes, desde ayer sábado las transportistas ya pueden descargar sus productos, luego de haberse recuperado el tránsito en la ex carretera marginal.
Los comercios, el transporte de vehículos ligeros, pesados y mototaxis, y los pobladores transitaron sin problemas por las calles, pero solo desde las 06:00 a.m. hasta las 06:00 p.m. Para transitar en las horas del toque de queda es necesario contar con un salvoconducto recavado en el fuerte Héroes del Cenepa, del Ejército.
En las calles de Bagua, aún se puede encontrar los signos de la violencia, como por ejemplo una camioneta totalmente calcinada en medio de la pista, en una de las arterias cercanas a la avenida principal.
Cifras oficiales
Mientras tanto en Lima se confirmó oficialmente que la cifra de policías muertos en los enfrentamientos entre nativos amazónicos y las fuerzas del orden subió a 24 luego de que fuera encontrado el cadáver de un efectivo desaparecido durante los disturbios del viernes en la zona amazónica de Bagua.
El viceministro del Interior, Wilson Hernández, precisó que además existen dos policías más cuyo paradero se desconoce. Cabe resaltar que, según las cifras oficiales, hay además nueve indígenas muertos, aunque fuentes de la zona elevan ese número a cerca de 40.
El funcionario informó que las fuerzas del orden lograron recuperar en cuatro operativos cerca de 40 fusiles AKM, 121 cartuchos de esta arma, 66 cartuchos de 9 milímetros, dos pistolas, un revólver y 12 cacerinas que les habrían sido arrebatados durante los enfrentamientos. También – dijo – se logró hallar 18 hondas y dos puñales con sangre.
Detalló que uno de los operativos más importantes se realizó durante la pasada noche cuando la Policía ingresó “pacíficamente” en un local pastoral de Bagua Grande donde se encontraban alojados cerca de 300 nativos. Allí se decomisaron tres AKM y los cartuchos correspondientes, y también ayer se intervino otro local en el que se escondían 200 nativos y donde se halló otro fusil.
Se precisó que en los operativos se detuvo a nueve adultos y a un adolescente de 16 años. Hernández, agregó que los cadáveres de los agentes fallecidos están en la morgue de Bagua Grande a la espera de ser trasladados a Lima para recibir sepultura.
Enterraron a policías muertos
Entre tanto, en medio de dramáticas escenas de dolor, fueron sepultados en el cementerio Santa Rosa de Lima, en Chorrillos, seis de los 24 policías fallecidos y a quienes se les concedió el ascenso póstumo por acción distinguida.
Se trata de los suboficiales José Vilela Morales, Javier Campos Marín, Melciades Díaz Villegas, Johnny Sánchez Sifuentes, Johnny Salcedo Meza y José Alberto García Guzmán, cuyos restos mortales llegaron horas antes a Lima, procedentes de la zona donde se produjo el deceso.
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