El alcalde del distrito de Daniel Alomía Robles, Walter Silva Mariño, denunció públicamente a personas inescrupulosas por talar indiscriminadamente árboles maderables en su jurisdicción, en horas de la noche y armados.
El burgomaestre también hizo publico su malestar por la presencia de pescadores furtivos, que utilizan dinamita y venenos en base a agroquímicos o barbasco –una raíz tuberosa tóxica-, que está depredando los ríos Tulumayo, Topa, Azul y Blanco, donde ya casi es imposible realizar la pesca deportiva o de recreación.
Silva Mariño solicitó la intervención del Ministerio Público, de la Policía Nacional, Inrena y las autoridades locales, para erradicar este flagelo. Lo más sorprendente, dijo, es que estas personas son foráneas y desconocidas en la zona.
Se supo que el pasado 9 de junio, un grupo de moradores de la microcuenca del valle de Tulumayo fue amenazado de muerte por pescadores furtivos, cuando intentaron paralizar el uso de la dinamita en una fuente de agua limpia.