El alcalde del centro poblado de San Juan Bautista, en Aguaytía, Wilfredo Rojas Arteta señaló que dedicarse a la siembra de coca “allá por los años 90” fue una experiencia negativa en su vida y aseguró que por ello abandonó ese cultivo ilegal porque desea “dormir y vivir tranquilo”.
“Yo me acuerdo que en el año 95 todos tenían coca, mis padres cosechaban 300 arrobas, pero no vivíamos bien, había mucha inseguridad. Fue una experiencia negativa para mí. Por eso al recordar el pasado ya no quiero sembrar coca, porque quiero dormir bien”, indicó.
El burgomaestre consideró que la decisión de sembrar cacao u otro cultivo es una potestad de cada agricultor, decisión que debe tomarla pensando en la mejoría y el bienestar de sus familias.
Informó que actualmente existe en su centro poblado una organización agraria integrada por ex cocaleros, quienes están trabajando para implementar cultivos alternativos en los terrenos recientemente erradicados.
Asimismo, les recordó a los agricultores de su zona que si deciden sembrar coca no deben olvidar que están expuestos a ser erradicados por el Corah.“Todos sabemos que si sembramos coca estamos expuestos a la erradicación”, indicó.