Agricultores conservacionistas recuperarán 190 cultivos nativos en riesgo

Un total de 189 ‘cultivares’ (variedades y razas) de 10 cultivos nativos del país, que estaban en riesgo de desaparecer, se encuentran ahora en proceso de recuperación gracias al mecanismo de Retribuciones por Servicio de Conservación de la Agrobiodiversidad (ReSCA) que implementa el Ministerio del Ambiente (Minam) en diferentes regiones, en coordinación con el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri).

Con esa visión, durante el periodo 2020-2021 se inició la recuperación de 140 cultivares nativos (de papa, oca, olluco, mashua o añu, maíz, quinua, maca, tarwi y kiwicha) en las regiones Cusco, Puno (Cuyocuyo y Ácora), Huancavelica y Apurímac. En la campaña 2019-2020 los agricultores de esos departamentos emprendieron la recuperación de 49 cultivares (5 de quinuas amargas y de colores en Puno; 8 de maíz en Cusco, así como 12 y 24 de papa en Huancavelica y Apurímac, respectivamente), que fueron identificados por las comunidades campesinas como especies en situación de riesgo de erosión genética, es decir, a punto de perderse.

El mecanismo ReSCA busca generar acuerdos de conservación y uso sostenible de cultivares nativos con alto riesgo de desaparición en el país. Las actividades se realizan mediante la siembra de variedades y razas nativas en riesgo y la redistribución de semillas entre las familias y otras comunidades de agricultores, motivando así la permanencia de sus prácticas tradicionales y ampliando anualmente las áreas de conservación, las cuales son monitoreadas por el proyecto GEF Agrobiodiversidad SIPAM del Minam, que se encarga de las labores de capacitación.

La ampliación de las áreas de conservación es necesaria ya que, de acuerdo a su especie, los cultivos nativos necesitan de un mínimo de superficie y de agricultores para dejar de ser considerados en riesgo.

Las retribuciones consisten en brindar insumos y equipos para fines agropecuarios (carretillas, picadoras, palas, picos, reposteros/armarios para utensilios de cocina y calaminas, entre otros), así como la distribución de semillas de los cultivares en proceso de restauración de su conservación en las chacras de los agricultores.