Congino Trinidad Nicasio es un agricultor del valle de Previsto, que dedicándose a la siembra de los cultivos de cacao y café ha logrado transformar su vida y hoy, es un ejemplo en su caserío por los niveles de productividad que está logrando conseguir en base a esfuerzo y dedicación.
El curtido agricultor cuenta que por optar por la vida fácil se dedicaba a los cultivos de coca y al procesamiento de drogas, delito por el que purgó condena por narcotráfico, sin embargo al salir del penal decidió cambiar, y desde esa época trabaja lícitamente sembrando cultivos alternativos.
“Antes estuvimos metidos en el narcotráfico, pero perdimos. Estuve tres años en Lurigancho pero eso es parte de mi pasado. Ahora estamos mejor, con los cultivos de cacao y café, vivimos con la frente en alto y no tenemos porqué escondernos de nadie”, relató el agricultor.
Con una expresión de satisfacción en su rostro, Congino Trinidad nos asegura que ahora cuenta con 5 hectáreas de cacao, de las que viene sacando 1,500 kilos por hectárea al año, con cuyo dinero de la venta sostiene a su familia y educa a sus hijos en la universidad de Tingo María y en el colegio de Aguaytía.
Como todo hombre golpeado por la vida, no se hace problemas por reconocer la ayuda recibida de instituciones como el PDA y la Municipalidad Provincial, y asegura que sin su aporte no hubieran logrado lo que ahora tienen en sus parcelas, “les estamos agradecidos por su apoyo”, afirma.
Casimiro Aliga Garrido, agente municipal de Nueva Palestina, comunidad de donde es Trinidad Nicasio, comenta que cuando les propusieron sembrar cacao muchos dudaron, pero pese a ello apostaron por ese cultivo porque ya estaban cansados de sembrar coca por los problemas que les generaba.
Don Casimiro cuando cuenta la historia de su comunidad y los cambios que han experimentado con los cultivos lícitos, y pone como ejemplo a Congino Trinidad, por ser uno de los agricultores que mejores resultados está obteniendo de las cosechas de su cacao.
Los comentarios están cerrados.