Agricultor del Alto Huallaga comparte con INFOREGIÓN sus exitosas experiencias agrícolas

Gilberto Díaz García, agricultor dedicado al cultivo de productos lícitos por más de 38 años en el distrito de José Crespo y Castillo, específicamente en la localidad de La Primavera, compartió con periodistas de INFOREGION sus exitosas experiencias que nunca contemplaron el cultivo de la hoja de coca ilegal.

El exitoso agricultor, quien es propietario de 30 hectáreas de fértiles tierras de cultivo en el sector de La Primavera, en la margen izquierda del río Huallaga, señaló que nunca necesitó cultivar coca y siempre se dedicó al cultivo de productos de pan llevar, los que le dieron la capacidad de salir adelante con su familia.

Parcela agrícola en el Alto Huallaga. Foto: Archivo.
Parcela agrícola en el Alto Huallaga. Foto: Archivo.

“Son 38 años que me encuentro al frente de mi parcela agrícola. Actualmente cultivo cuatro hectáreas de cacao orgánico, dos hectáreas de plátanos de la variedad Moquicho y, lo más importante, hace dos años sembré mil plantones de caoba -madera fina- sólo en la orilla de mi parcela, gracias al apoyo del Proyecto Especial Alto Huallaga (PEAH), que me ha proporcionado gratuitamente dichos plantones”, indicó.

El caserío La Primavera se ubica a nueve kilómetros al oeste de Aucayacu, en pleno valle del Alto Huallaga. En la zona, el río Pucayacu hace un recorrido de sur a norte y forma un fértil valle, donde se ubican los principales centros de producción de plátanos.

Allí, Díaz García vive junto a 90 agricultores y más de 700 pobladores en la localidad rural de La Primavera, todos ellos dedicados a la producción lícita de plátanos, maíz, frejol, cacao, café y arboles maderables.

Plantones de cacao en el Alto Huallaga. Foto: Archivo.
Plantones de cacao en el Alto Huallaga. Foto: Archivo.

“Nunca he requerido sembrar plantas de coca en mi parcela agrícola, porque nunca pensé vivir al margen de la ley. Soy consciente de que, a mis años, ya no podré disfrutar de la economía que me puedan generar estas mil plantas de caoba, ya que se va a necesitar unos 50 años para que estén listos para convertirlos en madera, pero mis hijos y mis nietos disfrutarán de ellos”, sostuvo el agricultor.

No obstante, el hombre del campo reclamó más atención del Estado para su comunidad, dado que -si bien se cuenta con una buena carretera vecinal que los une con Aucayacu y otras localidades rurales de la zona y con una escuela de primaria y secundaria- se requieren créditos y asistencia técnica para hacer producir por los menos al 50% sus chacras.

Finalmente, Díaz se quejó de que no se ha concluido la obra de construcción de una nueva aula en el plantel y una losa multideportiva, obras a cargo del gobierno local de José Crespo y Castillo en el marco del Programa de Reparaciones Colectivas y que significa una inversión de 100 mil nuevos soles.

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